Pese a quién pese, no hay duda de que la liberación de Palmira (ocupada desde Mayo de 2015) supone el mayor golpe sufrido por Daesh en Siria desde la intervención rusa iniciada en 2015; mas allá de su valor icónico y su estratégico emplazamiento, Palmira concentra importantes yacimientos de gas y petróleo hasta ahora en manos terroristas y que ahora recupera Damasco.
La caída de Palmira en 2015
En el momento de la captura de Palmira en mayo de 2015, Daesh se extendía ya desde Fallujah (Iraq) hasta Aleppo (Siria) , es decir, a lo largo de centenares de kilómetros de terreno prácticamente desértico, absolutamente accesibles a la vigilancia satelital estadounidense. La capacidad de Daesh parecía sobre extenderse en demasía y muchos analistas concluyeron entonces que tanto su capacidad logística así como cualquier avance masivo debería poder haber sido detenido a campo abierto por la aviación, más aún si, como demostró Putin ante la ONU, los convoyes de suministros y de transporte de petróleo robado alcanzaban decenas de kilómetros; sin embargo, la famosa Coalición no hizo despegar ni uno sólo de sus 180 aviones contra las columnas móviles de Daesh que avanzaban sobre Palmira, de la misma forma que ha sucedido en este 2016.
Ante los hechos rotundos, cabe preguntarse porqué la aviación rusa, con menores medios, ha sido perfectamente capaz de evitar cualquier posible reagrupamiento, hostigando a las unidades terroristas que se movían por el desierto. Lógicamente, también cabe preguntarse: ¿cómo explicar que Daesh siga existiendo después del supuesto esfuerzo unánime de la "comunidad internacional" y de la super-potencia militar estadounidense, que, por ejemplo, fue capaz de destruir el ejército de Saddam Hussein en apenas una semana? ¿Cómo explicar la destrucción absoluta de un país como Libia, y el derrocamiento de aquel Estado en menos de 9 meses por estos mismos actores, ahora incapaces de mover un dedo para destruir a Daesh?
Quizás atendiendo a las declaraciones de los funcionarios y dirigentes occidentales encontremos alguna pista. El portavoz del Departamento de Estado, Mark Tóner, declaraba públicamente el pasado 24 de marzo, que, "aunque igualmente buscaban derrotar al Daesh , EE.UU no daba la bienvenida a los esfuerzos del régimen sirio para reconquistar Palmira".
Declaraciones que una vez más dejan en absoluta evidencia a unos EE.UU absolutamente volcados en la consecución de su objetivo geopolítico; el derrocamiento de Bassar Al Assad. La lamentable actitud de personajes como Mark Toner no ha sido una excepción. El ministro de Exteriores, Jean Marc Ayrault, seguía martilleando con su monotemático mensaje: "los éxitos contra Daesh no eximen al presidente sirio; él es el principal responsable de la guerra en su país". (1)
Echando la vista atrás, cuando Daesh se hizo con Palmira en mayo de 2015, los mass media internacionales desataron la histeria en Occidente sembrando la idea del irresistible avance del terror yihadista, sin mencionar, por ejemplo, la sospechosa pasividad de la famosa Coalición. Un contraste notable respecto al hecho de su reciente liberación, apenas advertido en esos mismos medios; se trata evidentemente de ocultar o minimizar la victoria siria con la participación rusa, de Irán e incluso de milicias iraquíes.
Volviendo sobre lo anterior, si Daesh ha sido destrozado en una semana en Palmira por el Ejército sirio y sus aliados rusos, iraquíes y Hezbolá, ¿dónde quedan ahora las palabras del secretario de Estado, John Kerry, cuando en diciembre de 2014 se vanagloriaba de que los ataques aéreos estadounidenses habían frenado al Daesh pero que la derrota de los yihadistas podría durar años? (2)
Una posible e indirecta respuesta ya la ha ofrecido el propio Pentágono, qué pese a una ligera admisión del éxito, ya ha anunciado que no piensan ayudar en una hipotética ofensiva contra Raqqah que implique un éxito de Damasco.? Es éste su concepto de "combatir al enemigo común"?.
La batalla por Palmira
Rusia, a través de Serguei Rudskoi, jefe de Operaciones en el Estado Mayor de las Fuerzas Armadas rusas, señalaba la importancia estratégica la liberación de Palmira (3), como fundamental intersección de comunicaciones en el centro de Siria, puesto que las carreteras que allí confluyen conectan Palmira con todas las regiones del país y con los recuperados campos petrolíferos de Shaer, Mahr, Jihar y Jazl, en el oeste, el norte y el sur de Palmira.
Igualmente hacía pública la presencia y participación de consejeros rusos en la elaboración y desarrollo de los planes dirigidos a recuperar la ciudad. Esta presencia ha resultado de gran relevancia al mejorar significativamente el nivel de coordinación entre las fuerzas terrestres, medios aéreos y artillería, un factor de no poca importancia durante la operación de Palmira, incluida el heroico acto de sacrificio del oficial de las fuerzas especiales rusas, Alexander Projorenko, que atrajo los bombardeos de la aviación rusa sobre sí y pagó con su vida una vez su posicion de observacion avanzada destinada a guiar los ataques aereos rusos se vio rodeada de yihadistas.(4)
Después de que el Ejército sirio ganara terreno de forma continuada durante varias semanas en los alrededores de Palmira, la preparación para la definitiva ofensiva sobre la ciudad se inició a principios de marzo, cuando el EAS (Ejército Árabe Sirio), Fuerzas de Defensa Nacional y de Hezbolá, se concentraron en los alrededores de Palmira, para una ofensiva que comenzó finalmente el 6 de Marzo. Cabe señalar que en esta batalla participaron algunas de las unidades de élite del Ejército sirio y sus aliados, como la Brigada de los Halcones del Desierto y las Fuerzas Tigre, junto a unidades de Hezbolá.
El Ministerio de Defensa ruso estimaba que unos 4.000 terroristas se encontraban defendiendo Palmira a principios de marzo, apoyados por unas 20 piezas de artillería, 40 morteros, unas 100 plataformas de lanzamiento de misiles antitanque y unos 50 vehículos con armas pesadas.
Las Fuerzas Aéreas rusas y sirias dedicaron entonces intensos esfuerzos para establecer el control total de las rutas que confluían en Palmira con objeto de aislar a los defensores de Daesh. Las columnas de Daesh con refuerzos y suministros procedentes de Raqqa y Deir Ezzor que trataron de alcanzar Palmira fueron aniquiladas a campo abierto, obligando a desistir en estos intentos y cercando en efecto a los defensores de Palmira.
El dispositivo defensivo de Daesh en Palmira se basaba principalmente en fortificaciones y emplazamientos de artillería y otras armas pesadas en las colinas localizadas que rodean la ciudad. Una vez establecido el cerco, las identificadas posiciones terroristas fueron objeto de sistemáticos bombardeos aéreos ( incluidos helicópteros) y de artillería. Rudskoi detallaba cómo, entre el 7 y el 17 de marzo, la aviación rusa realizó más de 500 misiones de ataque en las cercanías de Palmira, que en los dos primeros días arrasaron la mayoría de los centros de mando y posiciones mejor defendidas, propiciando que el Ejército sirio fuera capaz de hacerse con las colinas de alrededor de Palmira en menos de 24 horas, precipitando así el colapso de la defensa yihadista.
Para asaltar la ciudad, el célebre batallón Tigre de las fuerzas especiales del Ejército Árabe Sirio y los Halcones del Desierto, formados y entrenados para combatir en el desierto, sumaron alrededor de 2 000 hombres que atacaron desde el sur de Palmira.(5)
Al este de Palmira, el 24 de marzo , 1 800 combatientes de las Fuerzas de Defensa Nacional de Siria, del Hezbollah libanés y milicias iraquíes neutralizaron el anillo de defensa exterior de los islamistas.
El 26 marzo, las fuerzas sirias ya ejercían el pleno control sobre la antigua Ciudadela de Palmira (que domina los restos arqueológicos) así como sobre la colina de Syriatell, cerca de la Ciudadela.(6)
Éste logro posibilitó al Ejército sirio poder golpear con precisión las posiciones de Daesh en la ciudad antes de iniciarse un asalto directo a la misma, gracias al eficaz empleo de drones de reconocimiento y de sistemas electrónicos que interferían las comunicaciones entre las unidades terroristas.
A su vez, durante esta segunda fase, las fuerzas aéreas rusas realizaron más de 2.000 ataques a posiciones terroristas dentro de la propia ciudad, allanando el camino de las fuerzas terrestres. Tras estos éxitos, sólo restaba comprobar si Daesh ofrecería una feroz resistencia casa por casa, lo que hubiera podido prolongar la batalla, o sí por el contrario, las maniobras de cerco del Ejército sirio y los bombardeos constantes obligarían a una retirada de la ciudad.
El asalto a Palmira fue emprendido por el Ejército Árabe Sirio una vez asegurada la periferia de Palmira. Finalmente, frente a la posibilidad de una aniquilación total, los yihadistas optaron por utilizar la ruta de retirada que el ejército sirio mantuvo abierta. En efecto, al facilitar en parte esta retirada se pretendía evitar un mayor daño en la histórica ciudad, ya suficientemente afectada por la criminal destrucción de milenarios restos arqueológicos por parte de Daesh. Salvo en episodios como los contraataques con camiones-bomba suicidas alrededor del Hotel Seminaris, al suroeste de Palmira, Daesh no ofreció la fanática resistencia que cabría esperar en la defensa de uno de sus más importantes bastiones.
El 27 de Marzo, las fuerzas pro-gubernamentales alcanzaban la entrada occidental de la ciudad; tras las enormes pérdidas previas y las súbitas retiradas, lo que se preveía como un arduo trabajo de limpieza casa por casa fue completado a lo largo de los días 28 y 29 de marzo, convirtiendo en indiscutible la victoria. Con ayuda de zapadores rusos, ahora se desminan puntos en la parte occidental de la localidad y de la antigua Ciudadela, cuya entrada fue volada por el Daesh antes de abandonarla y sufrió serios daños estructurales.
Como colofón, y evitando cualquier posible reagrupamiento, desde el aire fueron duramente hostigados los restos de las unidades terroristas que se retiraban por el desierto intentando alcanzar sus lineas en Raqqa o Deir Ezzor.
Ante los hechos rotundos, cabe preguntarse porqué la aviación rusa, con menores medios, ha sido perfectamente capaz de evitar cualquier posible reagrupamiento, hostigando a las unidades terroristas que se movían por el desierto. Lógicamente, también cabe preguntarse: ¿cómo explicar que Daesh siga existiendo después del supuesto esfuerzo unánime de la "comunidad internacional" y de la super-potencia militar estadounidense, que, por ejemplo, fue capaz de destruir el ejército de Saddam Hussein en apenas una semana? ¿Cómo explicar la destrucción absoluta de un país como Libia, y el derrocamiento de aquel Estado en menos de 9 meses por estos mismos actores, ahora incapaces de mover un dedo para destruir a Daesh?
Declaraciones que una vez más dejan en absoluta evidencia a unos EE.UU absolutamente volcados en la consecución de su objetivo geopolítico; el derrocamiento de Bassar Al Assad. La lamentable actitud de personajes como Mark Toner no ha sido una excepción. El ministro de Exteriores, Jean Marc Ayrault, seguía martilleando con su monotemático mensaje: "los éxitos contra Daesh no eximen al presidente sirio; él es el principal responsable de la guerra en su país". (1)
Volviendo sobre lo anterior, si Daesh ha sido destrozado en una semana en Palmira por el Ejército sirio y sus aliados rusos, iraquíes y Hezbolá, ¿dónde quedan ahora las palabras del secretario de Estado, John Kerry, cuando en diciembre de 2014 se vanagloriaba de que los ataques aéreos estadounidenses habían frenado al Daesh pero que la derrota de los yihadistas podría durar años? (2)
Una posible e indirecta respuesta ya la ha ofrecido el propio Pentágono, qué pese a una ligera admisión del éxito, ya ha anunciado que no piensan ayudar en una hipotética ofensiva contra Raqqah que implique un éxito de Damasco.? Es éste su concepto de "combatir al enemigo común"?.
La batalla por Palmira
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| Alexander Projorenko (D.E.P) |
Igualmente hacía pública la presencia y participación de consejeros rusos en la elaboración y desarrollo de los planes dirigidos a recuperar la ciudad. Esta presencia ha resultado de gran relevancia al mejorar significativamente el nivel de coordinación entre las fuerzas terrestres, medios aéreos y artillería, un factor de no poca importancia durante la operación de Palmira, incluida el heroico acto de sacrificio del oficial de las fuerzas especiales rusas, Alexander Projorenko, que atrajo los bombardeos de la aviación rusa sobre sí y pagó con su vida una vez su posicion de observacion avanzada destinada a guiar los ataques aereos rusos se vio rodeada de yihadistas.(4)
El Ministerio de Defensa ruso estimaba que unos 4.000 terroristas se encontraban defendiendo Palmira a principios de marzo, apoyados por unas 20 piezas de artillería, 40 morteros, unas 100 plataformas de lanzamiento de misiles antitanque y unos 50 vehículos con armas pesadas.
Las Fuerzas Aéreas rusas y sirias dedicaron entonces intensos esfuerzos para establecer el control total de las rutas que confluían en Palmira con objeto de aislar a los defensores de Daesh. Las columnas de Daesh con refuerzos y suministros procedentes de Raqqa y Deir Ezzor que trataron de alcanzar Palmira fueron aniquiladas a campo abierto, obligando a desistir en estos intentos y cercando en efecto a los defensores de Palmira.
El dispositivo defensivo de Daesh en Palmira se basaba principalmente en fortificaciones y emplazamientos de artillería y otras armas pesadas en las colinas localizadas que rodean la ciudad. Una vez establecido el cerco, las identificadas posiciones terroristas fueron objeto de sistemáticos bombardeos aéreos ( incluidos helicópteros) y de artillería. Rudskoi detallaba cómo, entre el 7 y el 17 de marzo, la aviación rusa realizó más de 500 misiones de ataque en las cercanías de Palmira, que en los dos primeros días arrasaron la mayoría de los centros de mando y posiciones mejor defendidas, propiciando que el Ejército sirio fuera capaz de hacerse con las colinas de alrededor de Palmira en menos de 24 horas, precipitando así el colapso de la defensa yihadista.
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| Crel. Suheil Al Hassan ( Fuerzas Tigre) |
Al este de Palmira, el 24 de marzo , 1 800 combatientes de las Fuerzas de Defensa Nacional de Siria, del Hezbollah libanés y milicias iraquíes neutralizaron el anillo de defensa exterior de los islamistas.
El 26 marzo, las fuerzas sirias ya ejercían el pleno control sobre la antigua Ciudadela de Palmira (que domina los restos arqueológicos) así como sobre la colina de Syriatell, cerca de la Ciudadela.(6)
Éste logro posibilitó al Ejército sirio poder golpear con precisión las posiciones de Daesh en la ciudad antes de iniciarse un asalto directo a la misma, gracias al eficaz empleo de drones de reconocimiento y de sistemas electrónicos que interferían las comunicaciones entre las unidades terroristas.
El asalto a Palmira fue emprendido por el Ejército Árabe Sirio una vez asegurada la periferia de Palmira. Finalmente, frente a la posibilidad de una aniquilación total, los yihadistas optaron por utilizar la ruta de retirada que el ejército sirio mantuvo abierta. En efecto, al facilitar en parte esta retirada se pretendía evitar un mayor daño en la histórica ciudad, ya suficientemente afectada por la criminal destrucción de milenarios restos arqueológicos por parte de Daesh. Salvo en episodios como los contraataques con camiones-bomba suicidas alrededor del Hotel Seminaris, al suroeste de Palmira, Daesh no ofreció la fanática resistencia que cabría esperar en la defensa de uno de sus más importantes bastiones.
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| Soldados sirios queman banderas de DAESH en Palmira. |
Como colofón, y evitando cualquier posible reagrupamiento, desde el aire fueron duramente hostigados los restos de las unidades terroristas que se retiraban por el desierto intentando alcanzar sus lineas en Raqqa o Deir Ezzor.
Después de Palmira ; el ocaso de DAESH
La liberación de Palmira abre un abanico de posibles nuevas operaciones ofensivas para el Ejercito Sirio; Daesh ya no cuenta con la movilidad de la que gozaba anteriormente y su actitud es claramente defensiva alrededor de las grandes ciudades que aún controla. Ahora es el Ejército Árabe Sirio quien verdaderamente tiene la inicitiva y la capacidad para iniciar operaciones en varias direcciones, pudiendo concentrar además su capacidad aérea ( junto al apoyo ruso) en profundizar el aislamiento de estos núcleos de control yihadista.
Aunque el objetivo final debe necesariamente incluir como colofón la completa liberación de Raqqah y sus zonas aledañas, cabe recordar que el Ejército Sirio mantiene decenas de frentes abiertos en muchas otras partes del país.(7)
Sin ir más lejos, algunas de las fuerzas de élite empleadas en Palmira, como la infantería de Marina ( que en Palmira servía sólo de apoyo) o los Halcones del Desierto, están ya en Latakia para participar en la posible toma de Jish al Sugur y centrarse posteriormente en la liberación de la provincia de Idlib , aún en manos de Al Nusrah.(8)
No obstante, y centrándonos en la zona este de Siria, como señalan analistas militares reputados, las fuerzas gubernamentales han debido primero asegurar las montañas del noreste de Homs, en previsión de evitar una nueva ofensiva de Daesh que tratara de recapturar Palmira. Si bien en este momento Daesh se encuentra a la defensiva y sin la capacidad de lanzar las sorpresivas y contundentes ofensivas anteriores ( principalmente debido a los daños en sus infraestructuras y en sus profusas redes de túneles) si es factible que pudieran producirse nuevas infiltraciones terroristas a lo largo de las montañas de al-Shaar y Jazal del noreste de Homs; ciertamente la region sudeste de la región de Homs continúa en parte bajo el dominio de Daesh, controlando el paso fronterizo de Tanf que une Homs con la provincia iraquí de al-Anbar.(9)
Éste enorme frente desértico ha supuesto una amenaza constante a las fuerzas sirias en el este del país con un enclave estratégico como bastión; la ciudad de Qaryatayn, situada a 70 kms de Homs y en poder de Daesh desde agosto de 2015. Es por ello que tras la liberación de Palmira, el Ejército Árabe Sirio haya desplazado fuerzas de importancia hacia Qaryatayn para liquidar la resistencia yihadista en este estratégico enclave; con su captura se lograrïa así otro éxito de gran relevancia estratégica.(10)
Con este foco liquidado,las próximas operaciones podrían dirigirse, por una parte, al levantamiento completo del largo cerco que las fuerzas y habitantes sirios sufren en la ciudad de Deir Ezzor, defendida por unos 4.000 hombres de la 104ª brigada de paracaidistas, la 137ª brigada de artillería del Ejército Árabe Sirio y fuerzas de la Defensa Nacional siria, recientemente reforzados tras el envío por vía aérea de municiones y un millar de soldados de refuerzo; en esta región Daesh sigue manteniendo unas fuerzas considerables.
Para ello es fundamental el control de la autopista Palmira-Deir Ezzor; la autopista M20, entre Palmira y Deir ez-Zor, de 90 kilómetros, constituye la única vía de comunicación a través del desierto. La posible acción coordinada entre las fuerzas sirias de Palmira y las de Deir ez-Zor, ofrece la opción, por una parte, de una ofensiva hacia Raqqah desde tres direcciones, y, por otra, también abre la posibilidad de alguna acción en dirección noreste hacia Hassaké, apoyando a las milicias kurdas para lograr el control total de la frontera con Irak eliminando los últimos restos de Daesh en esa zona. Respecto a las fronteras con Turquía, los éxitos de los combatientes kurdos han dejado actualmente a Daesh el control de una franja de solo 90 kilómetros.
En conclusión, a medio y largo plazo, el Ejército sirio tiene la opción de profundizar sus progresos en el este del pais, con vistas a la definitiva liberación de la asedida Deir Ezzor y de Raqqah, la capital de Daesh en Siria, a la vez que establece el control de las vías de comunicación que unen Siria a Iraq y que constituyen la arteria principal que mantiene unidos los territorios conquistados por los terroristas en ambos paises.
Con la presión que igualmente ejercen también las fuerzas iraquíes hacia Mosul (11), las vastas pérdidas territoriales, el daño a sus infraestructuras, financiación, rutas de suministro y la elevada tasa de bajas, podemos concluir que nos hallamos ante un escenario que sitúa a Daesh al borde del hundimiento tanto en Siria como en Iraq.
Aunque el objetivo final debe necesariamente incluir como colofón la completa liberación de Raqqah y sus zonas aledañas, cabe recordar que el Ejército Sirio mantiene decenas de frentes abiertos en muchas otras partes del país.(7)
Sin ir más lejos, algunas de las fuerzas de élite empleadas en Palmira, como la infantería de Marina ( que en Palmira servía sólo de apoyo) o los Halcones del Desierto, están ya en Latakia para participar en la posible toma de Jish al Sugur y centrarse posteriormente en la liberación de la provincia de Idlib , aún en manos de Al Nusrah.(8)
Éste enorme frente desértico ha supuesto una amenaza constante a las fuerzas sirias en el este del país con un enclave estratégico como bastión; la ciudad de Qaryatayn, situada a 70 kms de Homs y en poder de Daesh desde agosto de 2015. Es por ello que tras la liberación de Palmira, el Ejército Árabe Sirio haya desplazado fuerzas de importancia hacia Qaryatayn para liquidar la resistencia yihadista en este estratégico enclave; con su captura se lograrïa así otro éxito de gran relevancia estratégica.(10)
Con este foco liquidado,las próximas operaciones podrían dirigirse, por una parte, al levantamiento completo del largo cerco que las fuerzas y habitantes sirios sufren en la ciudad de Deir Ezzor, defendida por unos 4.000 hombres de la 104ª brigada de paracaidistas, la 137ª brigada de artillería del Ejército Árabe Sirio y fuerzas de la Defensa Nacional siria, recientemente reforzados tras el envío por vía aérea de municiones y un millar de soldados de refuerzo; en esta región Daesh sigue manteniendo unas fuerzas considerables.
En conclusión, a medio y largo plazo, el Ejército sirio tiene la opción de profundizar sus progresos en el este del pais, con vistas a la definitiva liberación de la asedida Deir Ezzor y de Raqqah, la capital de Daesh en Siria, a la vez que establece el control de las vías de comunicación que unen Siria a Iraq y que constituyen la arteria principal que mantiene unidos los territorios conquistados por los terroristas en ambos paises.
Con la presión que igualmente ejercen también las fuerzas iraquíes hacia Mosul (11), las vastas pérdidas territoriales, el daño a sus infraestructuras, financiación, rutas de suministro y la elevada tasa de bajas, podemos concluir que nos hallamos ante un escenario que sitúa a Daesh al borde del hundimiento tanto en Siria como en Iraq.
NOTAS;
(1)http://www.lepoint.fr/monde/syrie-ayrault-se-rejouit-que-palmyre-ne-soit-plus-aux-mains-de-l-ei-29-03-2016-2028718_24.php
(2)http://www.theguardian.com/world/2014/dec/03/us-isis-iran-islamic-state
(3)http://www.lavanguardia.com/internacional/20160331/40780527077/aviacion-rusa-lanzo-2-000-ataques-contra-yihadistas-en-la-operacion-palmira.html
(4)http://mundo.sputniknews.com/radio_que_pasa/20160329/1058194359/palmira-heroe-Alexander-Prokhorenko-militar-palmira.html#ixzz44gL0EFqg
(5)http://www.voltairenet.org/article190946.html
(6)http://www.almanar.com.lb/spanish/adetails.php?eid=123506&cid=23&fromval=1&frid=23&seccatid=67&s1=1
(7)http://sana.sy/en/?p=73254
(8)https://www.almasdarnews.com/article/marines-sirios-son-trasladados-jisr-al-shugur-tras-exito-en-palmira/
(9)https://www.almasdarnews.com/article/Isis-Bajo-amenaza-en-Palmira-tropas-Gubernamentales-se-acercan/
(10)http://www.rainews.it/dl/rainews/articoli/Siria-esercito-di-Damasco-marcia-sulla-citta-fantasma-di-Qaryatayn-d5611cc9-d3bc-45e7-8498-8e95430ee381.html
(11)http://www.almanar.com.lb/spanish/adetails.php?eid=123550&cid=23&fromval=1&frid=23&seccatid=66&s1=1
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