miércoles, 20 de abril de 2016

Obama y la Casa de Saud

Justo cuando se encuentra próxima la visita del presidente Obama a Arabia Saudí (1), tal vez sea buen momento para detenerse a reflexionar sobre tan particular y dañina monarquía, anclada socialmente en las más oscuras catacumbas medievales, a la par que actor geopolítico clave tanto a nivel regional como mundial y, por extraño consenso, considerado aliado occidental.

Al menos en el caso de España, son sobradamente conocidos los estrechos vínculos entre ambas familias reales, así como los intereses empresariales españoles en materia de venta de armas al régimen teocrático de Ryhadd.(2)

Las tierras de la Casa de Saud
El reino saudí debe entenderse no como nación, sino como las directas posesiones de la familia real ( incluidas las riquezas de su subsuelo) puesto que ésta descripción se acerca mucho más a la realidad; sin ir más lejos, Arabia Saudi siquiera dispone de un presupuesto público como tal y los más de 15.000 miembros de la aristocracia han logrado ir manteniendo su status merced a cuantiosos subsidios.

El problema se presenta ahora cuando, con una coyuntura económica complicadísima gracias en gran parte a sus propios errores, éste sistema social propio del feudalismo ha dejado de ser viable. La solución que la enloquecida Casa de Saud ha encontrado no es sino la de una huída hacia delante tanto en dentro del país como a nivel regional.(3)

Nueva hegemonía en Oriente Medio
Habida vista de la progresiva pérdida de influencia de EE.UU y de su voluntario repliegue, unido al nuevo papel de una Rusia que ni está en condiciones ni tampoco aspira a convertirse en el sustituto de EE.UU en la zona, la pugna por la hegemonía de Oriente Medio es ahora una pugna entre Irán y el CCG (Consejo de Cooperación del Golfo) con la monarquía saudita como máxima representante; la era de la superpotencia estadounidense parece acabar definitivamente, significando una sustancial variación del tablero geopolítico de Oriente Medio.

La reciente cumbre petrolera de Doha ha evidenciado al extremo este punto; la negativa saudí a negociar deriva de esta antagónica vision, puesto que los propios saudíes han esgrimido la negativa de Irán al recorte de producción para obrar de igual manera. Una posición que, en vista del enorme deterioro económico que sacude a Arabia, sólo puede entenderse como una especie de inmolación colectiva donde no importan las consecuencias si el enemigo también es arrastrado en la caída.

Ésta redistribución de los roles es una de las más importantes razones ( no la única) por las cuáles a día de hoy siguen en marcha los conflictos armados de Yemen y Siria; en el origen, siempre aparece Arabia Saudi.

Guerras de Yemen y Siria
En el plano internacional, la huella de la Casa de Saud puede observarse tanto en el origen como en la prolongación de conflictos tan terribles como los de Yemen y Siria.

En Yemen, con una guerra militarmente perdida y que ha supuesto incluso la retirada de aliados como Emiratos Árabes, se inicia un nuevo período de cese al fuego para la apertura de negociaciones en Kuwait entre saudíes y el movimiento chií yemení Ansarolah. 

Bandera de AQPA (Al Qaeda Península Arábiga) 
Fue Arabia Saudi quién optó por la ruptura unilateral de anteriores treguas provocando más de 30.000 muertos y la consolidación y fortalecimiento de AQPA (Al Qaeda Península Arábiga) , capaz de crear verdaderos califatos al más puro estilo ISIS (4).

Obama, consciente incluso de la implicación israelí en éste conflicto, dejará seguir actuando a sus anchas a los saudíes en una confrontación que el mundo ha decidido silenciar y a la que EE.UU otorgó su consentimiento en su debido momento.

Respecto a Siria, la voluntad de paz de Ryhadd se refleja en la reciente actitud del ACN (Alto Comité para la Negociación ), apartándose por orden saudí de las rondas de diálogo de Ginebra. El ACN es una criatura orquestada desde Arabia y que incluye a muchos de los grupos yihaddistas que operan en Siria bajo el otorgado título de "moderados". 

Jeysh Al-Islam
Entre ellos, Jeysh Al Islam (5) de cuya trayectoria terrorista nadie puede dudar. Será este momento para comprobar si la actitud estadounidense ha cambiado verdaderamente respecto al apoyo de grupos yihaddistas en Siria, más aún si cabe cuando no hace demasiado Arabia Saudí clamaba ser capaz de iniciar una invasión de Siria contra las fuerzas de Damasco; no es difícil imaginar que tipo de gobierno podrían instaurar los liberadores saudíes en Siria.

Histórica oportunidad estadounidense para desligarse del wahabismo saudi
Obama visita a un aliado histórico ( desde que Roosevelt firmara el pacto con Arabia Saudita de 1945 ,posteriormente prorrogado por 60 años más por el ex-presidente G.W. Bush en 2005) justo cuando empieza a manifestarse claramente que EE.UU se ha sacudido de la dependencia del petróleo saudita y, por ende, está reconsiderando su posición en la región. 

Jimmy Carter y el rey Khalid.
A día de hoy y en términos reales, de la doctrina Carter (1980)(6) que priorizaba el control militar de los yacimientos de hidrocarburos del Medio Oriente por parte de EE.UU , lo único que mantendría su vigencia es el eterno compromiso de Washington con la seguridad del estado de Israel. En éste sentido se enmarca el histórico acuerdo nuclear con Irán que abre la puerta para que la República Islámica de Irán reivindique su verdadero status regional y global.

Aún en éstas circunstancias, realmente no parece factible que Obama vaya ahora a hablar de Arabia como de un país con su propia policía ideológica -religiosa (Mutawa)(7), que emite fatwas tildando la posibilidad de que las mujeres conduzcan coches como de "acto diabólico" y que mientras practica decenas de ejecuciones mediante decapitaciones, alberga a conocidos terroristas en verdaderos retiros de lujo que califican de cárceles argumentando que no atentaron en suelo saudí.(8)

Obama tampoco está en situación, por ejemplo, de denunciar ante el mundo como los saudíes crearon y fortalecieron el Estado Islámico puesto que tanto su país como su administración son los verdaderos cerebros pensantes detrás de la aparentemente espontánea barbarie yihaddista desde hace décadas.

Es posible que Obama pueda escenificar en esta visita la brecha entre ambos países o que tal vez espere a otra ocasión. De lo que no cabe duda es de que es consciente del fin de ciclo que sacude la región desde hace tiempo y tal vez, trate de pasar a la Historia como el presidente que, al menos formalmente, amonestó a los monarcas saudíes en su propia casa; habrá que esperar.


Permisivos con Arabia Saudí
En Europa, salvo algunas voces aisladas que apuntan a la regulación de las inmensas donaciones que el reino wahabí ofrece para la financiación de mezquitas radicales, pocos se plantean la implicación directa que mantiene Arabia Saudí respecto al terrorismo internacional; mientras las élites corporativas puedan seguir haciendo negocios, se buscarán otros chicos expiatorios y se inventarán otros "enemigos" de la democracia occidental como Siria, Rusia e Irán a la par que el adoctrinado ciudadano europeo seguirá creyendo estos relatos que poco tienen que ver con la realidad. Uno de estos últimos episodios tuvo que ver con la reciente intercepción por parte de la Policía española de un envío de uniformes y ropa militar para Daesh fletado por Arabia Saudi vía Turquía. ?Acaso no parece esta una noticia digna de algún titular? No fue así.(9)

En EE.UU también algunas voces disienten de la histórica alianza con la monarquía teocrática saudí, relacionando de manera abierta y directa a los saudíes con el terrorismo yihaddista de más alto nivel. Una minoría que sencillamente ha tenido la molestia de escuchar a la mismísima Hillary Clinton relatando públicamente y ante organismos oficiales cómo EE.UU ha estado detrás de estos movimientos desde hace décadas.

Tan es así que ante la visita del mandatario estadounidense y merced a la pujante oleada de voces internas que en EE.UU piden la desclasificación de informes del Congreso acerca del 11-S que dejarían en clara evidencia la enorme implicación saudí ( ?y estadounidense?) en aquellos hechos de 2001, la monarquía saudita ha llevado a cabo una serie de advertencias acerca de las consecuencias que podrían de ello derivarse; retirar los cerca de 750.000 millones de dólares en inversiones saudíes en EE.UU. 

Una amenaza poco creíble y que en Washington entienden como un farol pero que deja a las claras el tipo de relación que ahora mismo existe entre ambos países. Por ahora, la esperpéntica justicia estadounidense ha condenado a...!!Irán!! a indemnizar económicamente a las familias de victimas del 11-S pese a lo absurdo que parezca.


NOTAS :

1. http://internacional.elpais.com/internacional/2016/04/20/actualidad/1461147794_573736.html
2. http://www.eldiario.es/politica/Congreso-revocar-Arabia-Saudi-Yemen_0_502550739.html
3. http://lugrogeopolitica.blogspot.com.es/2015/12/arabia-saudi-y-el-petroleo-victima-de.html?m=1
4. http://noticias.lainformacion.com/disturbios-conflictos-y-guerra/terrorismo/Qaeda-consolida-Yemen-medidas-populares_0_906509738.html
5. http://www.voltairenet.org/article191343.html
http://www.rcinet.ca/es/2016/04/19/el-alto-comite-de-negociacion-de-la-oposicion-siria-se-retiro-de-la-mesa-de-negociacion-en-ginebra/
6. http://elpais.com/diario/1980/01/26/opinion/317689205_850215.html
7. http://www.bbc.com/news/world-middle-east-36034807
8. http://hispantv.com/newsdetail/arabia-saudi/253051/prision-lujosa-terroristas-arabia-saudita
9. http://www.elconfidencial.com/espana/2016-03-03/la-policia-intercepta-20-000-uniformes-militares-destinados-a-terroristas-del-daesh_1162830/

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