sábado, 31 de octubre de 2015

Rusia entierra al viejo mundo unipolar estadounidense en Oriente Medio

La intervención rusa en Siria significa la primera ocasión en que las fuerzas armadas rusas se despliegan fuera de su país desde la guerra de Afganistán, hace ya tres décadas.Buscando un significado más profundo, definitivamente otorga a Rusia un papel de primer nivel en la construcción del orden internacional que está surgiendo tras el fin del mundo unipolar regido por EE.UU desde el final de la Guerra Fría.

Una decisión que, más allá de las consecuencias que está acarreando para el conflicto sirio, supone un desafío directo a la dominación de Estados Unidos en dos regiones de fundamental importancia geopolítica para el mantenimiento de la hegemonía estadounidense en el mundo; Oriente Medio y el Mar Mediterráneo,y que forma parte de una estrategia ambiciosa en una arco amplio que va desde el Báltico hasta el Golfo Pérsico.

Desde el punto de vista de Occidente,la exitosa irrupción de la Rusia de Vladimir Putin puede suponer no solo una derrota de gran magnitud para los intereses de Washington,sino también la definitiva confirmación de que el mundo en 2015 ha cambiado, al presentar Rusia un directo desafío a la unipolaridad estadounidense y que se traduce como que ya no caben dudas acerca de que Washington deberá tener en cuenta los intereses rusos y los de sus aliados para resolver los conflictos en esta región.

La antigua URSS y el mundo árabe
Durante el periodo de la "Guerra Fría" la Unión Soviética ejerció como principal aliada de varios regímenes árabes de tendencias “progresistas” o "pan-arabistas", frente a los países con gobiernos de tendencias pro-occidentales,claramente inclinados hacia la influencia estadounidense.

La URSS,efectivamente,colaboró y cooperó en distintas facetas con países como la República Egipcia de Gamal Abdel Nasser, la Siria de Hafez al Assad,el Iraq de Sadam Hussein,la Argelia del presidente Ben Bella,Yemen del Sur (desaparecido en 1990), el Afganistán del Partido Democrático Popular o los grupos marxistas de la Organización de Liberación de Palestina.

Nikita Khrushchev y Gamal Nasser, 1964
Una historia cuyo punto de partida muchos historiadores coinciden en situar a partir de las reticencias estadounidenses a colaborar con Egipto en el fundamental proyecto de la Presa de Asuán en el Nilo, ya que Nasser optó entonces por recurrir a la ayuda soviética para su construcción iniciándose así una cooperación comercial a la que pronto se sumarían los países anteriormente mencionados.

En las guerras árabe-israelíes posteriores (entre 1956 y 1967) tanto el ejército egipcio como los de otros países árabes recibirían armamento soviético y asesoramiento militar,unido al respaldo diplomático soviético en la esfera internacional.En este sentido la URSS ofreció a estos estados árabes un contrapunto a la influencia estadounidense,que prestaba apoyo militar, económico y diplomático a Israel.

Sin embargo,el sucesor de Nasser,Anuar al Sadat,varió radicalmente el rumbo de la política exterior egipcia en 1972 al romper las estrechas relaciones entre Egipto y la URSS en favor de una aproximación a EE.UU, que terminaría por trastocar toda la geopolítica de Oriente Medio.

Bnadera de RDP de Yemen,primer estado arabe
socialista de la Historia entre 1967 y 1990.
Moscú,pese a perder a su mayor aliado árabe,continuó profundizando su cooperación con Siria, Iraq, Argelia, Yemen del Sur o la OLP.

Incluso firmó tratados de defensa y cooperación con Siria o Irak,como el que aún estaba vigente cuando EE.UU. y sus aliados entablaron la primera guerra del Golfo en 1991; en aquellos momentos, una URSS en plena desintegración no pudo oponerse a la destrucción de su aliado iraquí,que se sucedía casi a la par que el proceso de desintegración de Yugoslavia.

Rusia vuelve a ostentar un papel clave en Oriente Medio
Por tanto,la desaparición de la URSS y del bloque socialista propiciaron una década de total hegemonía estadounidense en Medio Oriente. Con el fin de la Guerra Fría ,EE.UU consideró que había llegado el momento de recomponer el mundo árabe en la búsqueda de un nuevo orden para Oriente Medio. Llegaron así los fracasos en las guerras de Irak y Afganistán. 

Bajo el mandato del presidente Putin a partir del año 2000, Rusia comenzó a recuperar parte de la influencia antigua diplomacia soviética en Oriente Medio en países como Egipto, Siria, Iraq, Palestina.

En 2011, EE.UU recompuso su estrategia y diseñó y ejecutó la mal llamada "Primavera Árabe", exaltada por los medios de comunicación occidentales como una sublevación de las clases medias laicas e islamistas moderadas, pero que realmente solo afectó a repúblicas como Túnez, Egipto, Libia, Yemen o Siria (algunas de las cuáles estuvieron alineadas con el bloque soviético en la Guerra Fría) esquivando a las monarquías de Arabia Saudí, Jordania, Omán o Emiratos Árabes.

El objetivo era,y continúa siendo,la instauración de la Hermandad Mususlmana en el mayor número de países posible.
Lejos de propiciar gobiernos democráticos o desarrollo de la región,la mal llamada "Primavera árabe" solo ha traído a los estados de Oriente Medio el derrocamiento violento de los regímenes señalados como Libia o el intento en Siria e Irak, la destrucción de las estructuras estatales y un absoluto caos y anarquía ,que bajo el manto protector de EE.UU,Europa y los regímenes del Golfo, solo ha servido para favorecer el fortalecimiento de organizaciones como el Estado islámico y Al Qaeda,aunque Occidente trate de disimular este descarado plan insistiendo una y otra vez en que su alternativa es una fantasmagórica oposición siria moderada, que está, de hecho, vinculada a estas mismas organizaciones terroristas.

Como respuesta,en este año 2015, Rusia ha optado por actuar de forma contundente al considerar como inconcebible la derrota de Bashar Al Assad y la desaparición del estado sirio.

Unido a su actuación en Siria,el resurgimiento de Rusia como un jugador clave en Oriente Medio está demostrándose como igualmente decisivo para el avance en la cuestión nuclear de Irán,para el restablecimiento de una renovada relación con el Irak post-estadounidense o para la intermediación en conflictos tan enquistados como la problemática palestino-israelí o el conflicto de Turquía en relación a los kurdos.

Tal vez acertaba el diario estadounidense "The Washington Post" cuando recientemente resaltaba que la reciente reunión en Moscú entre el presidente Vladímir Putin y Bashar Al Assad significa "otra oportunidad de enfatizar el resurgimiento de Rusia como un jugador clave en Oriente Medio". (1)

Lo cierto es que Rusia ha terminado por asumir el liderazgo en la solución de problemas internacionales, que a su vez son también cuestión de seguridad nacional interna, puesto que se estima en unos 4.000 el número de terroristas procedentes de las ex repúblicas soviéticas que luchan en Siria.

Rusia se ha implicado volviendo a ser un elemento indispensable para la estabilidad en Oriente Medio a la vez que ejerce cada vez más presión sobre Washington.En este sentido,Rusia está poniendo sobre la mesa el fin de la unipolaridad estadounidense a base de hechos demostrados,como demuestra también la actitud del Kremlin en el tema ucraniano, con la cuestión de Crimea o con su respuesta ante la política estadounidense de sanciones.

La fortaleza militar de Rusia
La intervención rusa en Siria ha demostrado al menos tres cosas; en primer lugar,preparada discretamente durante algún tiempo,ha logrado sorprender y descolocar a Occidente.

Como segunda conclusión,constata públicamente el avanzado estado de modernización del ejército ruso.Finalmente,corrobora de nuevo que Moscú esta en condiciones y en disposición de apostar fuerte en defensa de sus intereses.

Y eso significa que desde el punto de vista militar cuenta con la capacidad de intervenir de manera decisiva en un conflicto más allá de sus fronteras, proyectando fuerzas y elementos contundentes como los que estamos pudiendo observar en Siria.

Sukhoi 30-SM
Rusia ha mostrado en Siria algunos de los más modernos aviones de combate disponibles, como el SU-30SM o el SU-34. Rusia ha empleado en Siria algunas armas nunca probadas en condiciones de combate real, como las bombas KAB-500S-E (guiadas por satélite) o los misiles de crucero navales Kalibr ,lanzados desde 1.500 kms de distancia en el Mar Caspio, el pasado 7 de octubre de 2015 contra las posiciones terroristas en Siria.

Los misiles Kalibr,que han demostrado una precisión incluso más certera que los Tomahawk estadounidenses, vuelan a muy pocos metros sobre nivel del mar para entorpecer su interceptación y a una velocidad de unos 3 Mach,siempre guiados por el sistema de navegación vía satélite ruso GLONASS. (2)

No es la única "desagradable" sorpresa que la OTAN se ha encontrado en el despliegue ruso en Siria,donde la propia OTAN reconoce haberse topado con inesperados equipos avanzados rusos de guerra electrónica. (3)

Según reconoció públicamente el máximo comandante de la OTAN, el general Philip Breedlove durante una conferencia celebrada en la Fundación Marshall, Rusia habría creado una zona de exclusión alrededor de la provincia de Latakia, donde se halla la base aérea rusa de Hamaimim y la también base naval rusa de Tartus.

Una zona articulada en torno al sistema automatizado C-41 (mando, control, comunicaciones, informática, información e interoperabilidad) y a los sistemas Krasuja-4, que realizan una continua interferencia de los radares de vigilancia, permitiendo a Rusia imponer su supremacía en la guerra radio-electrónica (Electronic Warfare – EW) contra los sistemas de reconocimiento terrestres, aéreos y por satélite estadounidenses, am,en de otros tipos de material moderno que generan contramedidas contra los medios de vigilancia aérea y por satélite de los EE.UU. (4)

Sistema 1RL257 'Krasuja-4' 
El general Breedlove también reveló que no es sólo en Siria donde los rusos ha creado zonas de exclusión para la OTAN; ya existen en Kaliningrado, en el Mar Báltico, y en la costa rusa del Mar Negro, Crimea incluida.

Para su protección, Rusia podría disponer muy pronto del sistema de defensa antiaérea S-400 Triumf, cuyas últimas pruebas del nuevo misil de largo alcance se efectuaron el pasado abril: un sistema que permite detectar y abatir cualquier objeto aéreo, independientemente de si es un avión o un misil balístico, en un radio de 400 kilómetros y a una altura de entre cinco y 60 kilómetros. (5)

Rusia trata de articular una nueva arquitectura financiera mundial
Tras el referéndum y posterior adhesión de Crimea a Rusia, Estados Unidos ha desplegado todo tipo de presiones sobre la Unión Europea para que restrinja el acceso de Rusia al SWIFT, el sistema de pagos internacionales y pieza clave en la arquitectura financiera global,tratando con ello de estrangular a la economía rusa.

Como respuesta,Rusia ha articulado un sistema de pagos alternativo que trata de intensificar las operaciones entre los bancos de origen ruso,a lo que hay que añadir que el presidente Putin ordenó la pasada semana la completa prohibición del uso del dólar como moneda de pago en el sector petrolero dentro de la Federación de Rusia; el comercio de crudo dentro del país deberá efectuarse exclusivamente en rublos. (6)

Sobra decir que Moscú alienta a sus socios más cercanos,como China o el resto de BRICS a seguir su ejemplo tanto en el abandono del dólar como en la organización de sistemas financieros alternativos al SWIFT y a la arquitectura occidental, que incluye al FMI, el Banco Mundial y al propio Banco de Pagos Internacionales, entre otros. (7)

Al mismo tiempo, Rusia y China seguirán trabajando codo a codo en los proyectos de las Nuevas Rutas de la Seda y que incluye, entre otros,el envío del gas ruso hacia Asia.

Doctrina de Seguridad renovada
Una vuelta a la primera línea de la escena internacional que Putin ha decidido plasmar a través de la introducción de cambios en la estrategia de la seguridad nacional.Aplicada hasta el año 2020,esta nueva doctrina de seguridad nacional implicará una política exterior activa, que según el Consejo de Seguridad Nacional de Rusia,debe excluir el "hermetismo de Rusia respecto al mundo".(8)

Según la oficina de prensa del Consejo, el presidente ruso Vladímir Putin ya había tomado una decisión al respecto. La versión exacta de la nueva estrategia será presentada al presidente antes de finales del año en curso, informa la oficina.

De acuerdo con el Consejo, la nueva Estrategia presupone "la continuidad de la política estatal en el área de seguridad nacional, así como la continuidad del sistema de intereses nacionales y de las prioridades estratégicas nacionales".

Un nuevo enfoque plasmado,por ejemplo, en la implementación de un sistema de defensa antiaérea unificado entre Rusia y Bielorrusia, que debería operar desde finales de 2016.De igual manera el propio ministro de Defensa ruso, Serguéi Shoigú anunciaba recientemente que pronto finalizará la construcción de una base militar en las islas árticas de Kotelny enfocada a garantizar la seguridad de las rutas árticas,fundamentales en el siglo XXI, y de las explotaciones rusas de hidrocarburos en la región.

NOTAS :

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