Expertos a sueldo
Para quienes hemos tratado de seguir y comprender el conflicto sirio desde sus inicios en 2011 resulta desagradablemente sorprendente observar la cantidad de pseudo-expertos a sueldo aparecidos en los últimos días en medios de comunicación occidentales, exponiendo sus planteamientos y quejas al unísono; eso sí, únicamente desde el anuncio de retirada estadounidense anunciado por Trump y el inicio de la Operación Primavera de Paz puesta en marcha por Turquía y sus fuerzas yihadistas anexas.
Analizar la cuestión en profundidad (precedentes, causas, desarrollo y consecuencias finales) requeriría un artículo diferente y una minuciosa observación de la evolución de los acontecimientos por venir, más aún cuando Damasco ha comenzado a actuar en el norte de Siria tras alcanzarse un acuerdo con la dirigencia kurda.
Pero eso no entra dentro de los planes de estos “expertos" acostumbrados a “analizar y juzgar" complejas realidades geopolíticas a base de tuits y titulares sensacionalistas de más que dudosa objetividad, además de basarse en realidades artificialmente construidas por esos mismos medios.
La última y contundente prueba de la propaganda de guerra disfrazada de información puesta en marcha contra Siria desde hace 8 años la proporciona la cadena estadounidense ABC News, provocando las críticas directas de Trump ante la citada “noticia".
En el video, que el corresponsal extranjero de ABC Ian Panell afirmó haber sido "obtenido por ABC News", supuestamente se mostraban las "horribles atrocidades" de "Turquía y su bombardeo militar de civiles kurdos en una ciudad fronteriza siria ”.
En tiempo récord fue demostrado que se trataba del video de una exhibición militar filmado en Kentucky durante un evento llamado "Military Gun Shoot & Military Gun Show" y publicado en YouTube en 2017. (1)
La cruda realidad es que la formación de la opinión pública en Europa y América entorno al Medio Oriente se basa en la experta opinión de creadores de contenidos a sueldo cuya gran mayoría apenas podría situar Siria en un mapa sin ayuda de Google, no digamos aún cuando tratan de hablar de regiones o ciudades de las que jamás oyeron hablar hasta ahora y que en un futuro apenas volverán a ser nombradas cuando el interés de los que verdaderamente controlan esta “prensa libre" se fije en cualquier otro asunto.
Cabría una profunda reflexión al respecto; si es evidente que este montaje buscaba desacreditar a Trump, cabe preguntarse que no habrán hecho estos mismos medios en su campaña contra Siria. Sin embargo, dicha reflexión no aparece en ninguna de las columnas y opiniones de los “expertos" a sueldo ya que desmontaría todo el relato construido y fabricado desde 2011.
Por ello, este artículo no tratará de competir con la aguda sabiduría de los “expertos" a sueldo de The Washington Post, Al Jazeera, El País, ABC News, Sky, The Guardian o Infobae, por citar algunos.
En cambio, tratará de exponer la verdadera cara de los al parecer únicos protagonistas presentes en la región; los ángeles kurdos.
Cuando los kurdos apoyaban la “revolución”
Alberto Rodríguez García es uno de esos propagandistas que trabajan para el Kremlin a sueldo, a diferencia de los honrados periodistas pro-OTAN que hacen su trabajo de manera altruista y gratuita. El Parlamento Europeo ya se apresuró hace años a comparar la “propaganda de los medios rusos RT y Sputnik con la del Estado Islámico”.
Despojándonos del modo irónico ( el párrafo anterior), Rodríguez García resume rápidamente las hazañas de los “ángeles" kurdos:
“Las mismas YPG que ahora piden ayuda desesperadamente a Rusia y Siria, no dudaron en 2012 ser simples espectadoras mientras veían cómo el Ejército Árabe Sirio se desangraba en el norte. Son las mismas YPG que en 2013 abatieron a 376 y capturaron a 790 soldados del Ejército Sirio (y ningún rebelde).
Son las mismas YPG que ese mismo año intentaron expulsar a las autoridades sirias de Hasaka. Son las mismas YPG que en 2014 intentaron expulsar a las autoridades sirias de Qamisli. Son las mismas YPG que en 2015 crearon las Fuerzas Democráticas Sirias, forjando alianzas con los mismos grupos rebeldes que llevaban años combatiendo al ejército sirio. Algunos de estos grupos, como Jaysh Thuwar ar-Raqqa, Liwa al-Jihad fi Sabeel Allah o Liwa Owais al-Qorani por cierto, antiguos aliados de al-Qaeda y hasta ISIS.
Son las mismas YPG que en 2016 volvieron a intentar expulsar a las autoridades sirias de Qamisli y Hasaka, atacando directamente a los asirios locales. Son las mismas YPG que en 2017 se enfrentaron al Ejército Sirio en Tabqa. Son las mismas YPG que en 2018 cerraron escuelas y detuvieron a patriarcas asirios por no aceptar el modelo nacionalista kurdo que querían imponer a la población re-escribiendo la historia.
Son las mismas YPG que en 2019 ya habían entregado al menos 12 bases en el norte de Siria a Estados Unidos. Basta tener algo de memoria pues, para entender que el gobierno sirio "no se vea preparado para negociar con los grupos kurdos apoyados por EE.UU." (2)
Rojava
A la hora de presentar mapas e infografías, los mass media cometen sistemática y deliberadamente el mismo “error”.
Al mostrar dichos mapas y definir la zona controlada por EE.UU y sus aliados kurdos (que incluyen también instalaciones militares francesas que son también convenientemente olvidadas) se muestra la zona como una entidad única y continua rebautizada como “Rojava".
No solo se silencia la presencia militar francesa o británica, sino que se excluyen deliberadamente los enclaves que se han mantenido fieles a Damasco durante todos estos años, soportando el asedio no solo de DAESH, sino, principalmente, de las milicias kurdas que no han parado de tratar de arrebatar estas ciudades al gobierno sirio por todos los medios, incluidas operaciones militares contra las fuerzas leales al Gobierno sirio.
Hablamos de las ciudades de Qashmili y Hassaka, junto a algunas zonas rurales aledañas.
De hecho, habría que atribuir la mayor parte del mérito al heroico y difunto Mayor General Issam Zahreddine, al cual tras serle ordenada su presencia en Deir ez-Zor debido a la muerte del comandante general Jameh, se hizo conocido por visitar frecuentemente estos enclaves leales al gobierno sirio anclados en zona kurda contribuyendo decisivamente a detener la expansión de DAESH en esta zona y conseguir que aquellas zonas permanecieran leales, al menos en gran parte, a Damasco.
Es un hecho comprobable como casi todos los medios occidentales reproducen esta farsa acríticamente buscando presentar la zona ocupada por los kurdos como una entidad única y consolidada, prácticamente como un nuevo Estado independiente frente a la opinión pública occidental.
YPG en Alepo
De la misma manera, cuando se representa la zona controlada por el gobierno sirio, raramente se destaca la presencia tolerada de las YPG en Alepo, donde se asienta desde hace décadas la población kurda en torno al barrio de Seikh Masqoud.
Sobre su papel durante el prolongado asedio yihadista a Aleppo cabría definirlo, cuanto menos, de controvertido, pues básicamente se podría decir que se dedicaron en exclusiva a la defensa de su zona a partir de que los ataques yihadistas se intensificaron en dicha barriada al norte de Aleppo; antes de ello, mantuvieron en la práctica una “neutralidad" frente a los “rebeldes moderados" creyendo que podrían obtener algún beneficio futuro y mientras la población de Alepo sufría diariamente.
El relato de uno de estos “rebeldes moderados" en 2012 y recogido por The Guardian no deja lugar a la duda:
“Durante mucho tiempo, los distritos de al-Ashrafiyeh y Sheikh Maqsoud estuvieron bajo el control del PKK, que está en alianza con el régimen de Assad (ayuda a detener a los miembros de la FSA y los entrega al ejército sirio).
Al principio, no planeábamos abrir un frente desde esta dirección, quiero decir al-Ashrafiyeh, para evitar enfrentamientos con el PKK. Nuestro objetivo es el régimen.
El PKK había acordado no interferir y no apoyar a ninguna parte del conflicto. No atacamos a ningún miembro del PKK [hoy], de hecho se retiraron para despejar el camino para nosotros. Era un trato que sacarían antes de la llegada de la FSA. Los enfrentamientos fueron solo con el ejército sirio.
El PKK aceptó el acuerdo después de mucha presión del pueblo kurdo..”. (3)
Lo innombrable: Israel
Trump tiene razón en un aspecto; mantenerse en la región , en la actual coyuntura geopolítica, no es parte de los intereses estadounidenses. Lo que no se aventura a decir el Presidente estadounidense es que sus presencia sirve a los intereses de su verdadero aliado incondicional como es Israel.
La estrategia de fragmentación de los estados que rodean a Israel es una de sus máximas prioridades en materia de seguridad, entendiendo que pequeños estados fragmentados y organizados en base a caracteres étnico/confesionales, tenderían a enfrentarse entre ellos e imposibilitarían una gran alianza regional contra el supuesto enemigo común: el propio Israel.
En directa relación con lo citado, uno de los aspectos más oscuros y sistemáticamente ocultado por los medios occidentales es el proceso de kurdificación forzosa acaecido en el norte de Siria desde la implantación de la administración kurda en dichas zonas, con la descarada intención de configurar la creación de su hipotético futuro estado en base a criterios étnicos, un factor totalmente ajeno a la idiosincrasia de la República Árabe Siria desde su creación.
Antes de la guerra, los kurdos en Siria constituían menos del 10% de la población, mientras que antes de comenzar la invasión turco-yihadista, las YPG controlaban más del 30% del territorio sirio, con población predominantemente árabe y asiria.
Incluso las propias Naciones Unidas, mediante su Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos declaró en su Comisión Internacional de Investigación Independiente sobre la República Árabe Siria que "comunidades enteras han sido desplazadas por las unidades de protección del pueblo kurdo (YPG) o las fuerzas demócratas sirias (SDF)".(4)
Resulta revelador quien ha sido uno de los primeros defensores acérrimos de la causa kurda en condenar las operaciones turcas; el mismísimo Benjamín Netanyahu.
Advirtiendo sobre una posible "limpieza étnica" se prestó inmediatamente a prestar generosamente apoyo humanitario al pueblo kurdo.
"Israel condena firmemente la invasión turca de las áreas kurdas en Siria y advierte contra la limpieza étnica de los kurdos por parte de Turquía y sus aliados….Israel está preparado para prestar asistencia humanitaria al valiente pueblo kurdo", eso sí, sin especificar qué tipo de ayuda pudiera ofrecer Israel a las fuerzas kurdas del YPG / YPJ. (5)
Tal vez estuviera refiriéndose al tipo de asistencia humanitaria prestada en hospitales israelíes a los combatientes yihadistas del sur de Siria.
Aún con mayor claridad y rotundidad se expresaba la presidenta el partido de derecha Yamina, Ayelet Shaked, exministra de justicia de Israel (2015-2019) reiterando sin ambigüedades su apoyo al establecimiento de un Estado kurdo:
“Nuestra memoria nacional requiere que nos rebelemos contra la violencia dirigida contra otra nación. Tal es la violencia turca dirigida contra el pueblo kurdo en el norte de Siria. He dicho esto en el pasado: es de interés tanto para Israel como para los Estados Unidos, por la seguridad y la estabilidad de la región, que se establezca un estado kurdo”, recalcó.
“Los kurdos son la nación más grande del mundo sin país, con una población de aproximadamente 35 millones de personas. Son un pueblo antiguo que comparte una conexión histórica especial con el pueblo judío. Los kurdos en general, y especialmente los que viven en Turquía y el norte de Siria, son los más progresistas y occidentales de esa región. Son la fuerza principal que luchó contra el Estado Islámico (ISIS) y sufrió miles de muertes, bajo el especial liderazgo conjunto de hombres y mujeres. El mundo occidental debería estar con ellos”, concluyó. (6)
Esta acérrima defensa israelí no puede sorprender a nadie medianamente informado ( no es el caso de la mayor parte de la población en Europa o EE.UU) o familiarizado con la evolución de la causa kurda a lo largo de décadas.
Entre los 8,5 millones de israelíes que hoy viven en Israel se cuentan unos 200 000 de origen kurdo. En marzo de 1951, la Operación Ezra y Nehemías (cuyo nombre hace referencia a los personajes bíblicos que organizaron la fuga de los judíos de Babilonia) permitió a 11 000 kurdos judíos emigrar de Irak hacia Israel. Aquella operación fue financiada por el American Jewish Joint Distribution Committee de Nueva York y los aviones utilizados en el puente aéreo fueron proporcionados por el dictador cubano Fulgencio Batista.
En fechas más recientes, se relaciona directamente a Israel, entre otros, del intento secesionista kurdo en Iraq ; fue realizado allí un dudoso referéndum en septiembre del 2017 que obligó a Bagdad a intervenir.
Sin ningún otro apoyo explícito en el mundo, solo un país expresó su apoyo, no sólo al referendo, sino también a la posibilidad de un Kurdistán independiente: Israel.
Netanyahu, declaraba entonces que su país "apoya los esfuerzos legítimos del pueblo kurdo para conseguir su propio Estado.” (7)
Curiosamente, también añadía en su comunicado lo siguiente:
“Israel se opuso al PKK (acrónimo kurdo del Partido de los Trabajadores del Kurdistán) y lo ve como un grupo terrorista, igual que se opone a una Turquía que apoya a HAMAS”.
Poco más de 2 años después Netanyahu parece haber olvidado ese terrorismo, una vez entiende que el proyecto israelí para extender el Kurdistán iraquí desde Kirkuk hasta el Mediterráneo, ocupado y protegido por bases militares estadounidenses, está a punto de fracasar definitivamente.
DAESH como arma arrojadiza
Más allá de pasar por alto el hecho de que ex-militantes de DAESH fueran enrolados entre las propias fuerzas del YPG tras rendirse, otro de los argumentos favoritos de estos expertos en Oriente Medio es la amenaza de fuga de miembros de DAESH mantenidos bajo custodia por las SDF.
Un argumento poco contundente si tenemos en cuenta como el EAS lleva lidiando con los restos de DAESH diseminados por el desierto hasta el día de hoy. Sin la amenaza de ataques aéreos estadounidenses contra sus fuerzas, el EAS y sus aliados son perfectamente capaces de destruir completamente dicha amenaza. (Fue la fuerza aérea de la Coalición la que atacó al Ejército Árabe Sirio en Deir ez Zor en septiembre de 2016 favoreciendo claramente a DAESH).
Además, no es descartable la posibilidad de que las propias fuerzas kurdas hayan “facilitado" de una u otra manera la huida de miembros de DAESH como herramienta de presión ante la comunidad internacional.
Esta reflexión da pie para cuestionar otro de esos dogmas esparcidos por la prensa y los gobiernos occidentales que tratan de derrocar al régimen sirio desde 2011: los kurdos aliados de EE.UU fueron quienes derrotaron a DAESH.
Tomando por buena la cifra de 11.000 bajas kurdas en lucha contra DAESH ( en una guerra donde se supera ampliamente la cifra de 500.000 muertos), no es aventurado comparar esta propaganda con la tradición anglosajona de exaltar el limitado impacto del desembarco de Normandía durante la II Guerra Mundial a la vez que se menosprecia el decisivo e inestimable esfuerzo de guerra soviético durante ese mismo conflicto.
Lo cierto es que sus movimientos militares, dirigidos por mandos estadounidenses, estaban dirigidos a bloquear cualquier avance gubernamental y en controlar los pozos de gas y petróleo al norte del Éufrates, impidiendo que el estado sirio pueda disponer de todos sus recursos para la reconstrucción económica.
Quizás el mayor ejemplo es como las fuerzas de las SDF apenas fueron capaces de tomar Raqqah (antigua capital del Califato) después de 5 meses de intensos bombardeos de la artillería y aviación estadounidense, con la casi total destrucción de la ciudad y mediante un acuerdo final por el cual los yihadistas fueron evacuados de allí hacia Deir Er Zor para continuar luchando contra el EAS (Ejército Árabe Sirio). Como contraste, valdría comparar el modo en que el EAS recuperó la ciudad de Khan Sheikoun (Idleb) este verano. (8)
Por todo ello y más, establecer una comparación entre el papel del EAS y sus aliados (Rusia, Hezbolá e Iran) y el de las SDF en la derrota del terrorismo en Siria es simplemente inadecuado y falaz.
La última en sumarse a este esperpento no es sino Hillary Clinton retuiteando una publicación de un corresponsal de NBC sobre las atrocidades desatadas por la incursión de Turquía en Siria, insinuando que todo es culpa del presidente Trump.
"Este horror repugnante es culpa de un hombre" , tuiteó el sábado por la noche, comentando en un tuit de Richard Engel de NBC, quien dijo que los oficiales militares estadounidenses están preocupados de que la ofensiva turca "abra la puerta a AMBAS depuración étnica de los kurdos y el regreso del ISIS /Al Qaeda."
Como era de esperar los internautas no tardaron en destacar la hipocresía de quien admitió en su momento que EEUU creó Al Qaeda:
“Todo este terror en Siria ni siquiera estar sucediendo si no hubiera sido por ti, Obama, Brennan y el armado de McCain, la financiación, la formación y potenciación de Al-Qaeda e ISIS terroristas en un intento fanática a derrocar al gobierno sirio legítima”.
Invasiones turcas
Si debiéramos fiarnos únicamente de las publicaciones de la prensa europea, estadounidense o canadiense, pareciera que Turquía ha iniciado una intolerable agresión militar contra un Estado independiente y soberano formado y administrado por los kurdos y bautizado en aquellos lares como Rojava.
Lo único cierto es que se trata de una intolerable agresión militar contra la integridad territorial de un Estado independiente y soberano, la República Árabe Siria, perpetrado por un estado miembro de la OTAN y principalmente a través de mercenarios yihadistas patrocinados, armados y entrenados no solo por Turquía sino también por EE.UU, Francia o Reino Unido.
De la misma manera, se obvia que no es ni mucho menos la primera vez que ocurre puesto que la propia Turquía: hace ya años que algunos nos molestamos en observar como tras la invasión yihadista de Aleppo, las infraestructuras y equipos industriales de la otrora joya económica siria eran desmantelados y llevados a Turquía. O como a través de sus proxys yihadistas, ya invadió la región siria de Afrin en 2018.
Tampoco podemos olvidarnos como Turquía ha sido y sigue siendo, junto a EEUU y Reino Unido, el principal valedor de Al Qaeda en la todavía ocupada provincia siria de Idleb, donde incluso tras el espectacular avance del Ejército Árabe Sirio en el verano de 2019 existen posiciones fortificadas ocupadas por el propio Ejército turco que quedaron aisladas (Morek) en medio de aquella brillante ofensiva que los turcos y los medios de difusión occidentales trataron de detener y calificaron como un nuevo atropello del sangriento régimen sirio a los derechos humanos y en favor de los “rebeldes"; los mismos “rebeldes" que Turquía emplea como fuerza de choque ahora.
En sintonía, el máximo líder de Hayat Tahrir al-Sham (Al Qaeda), Abu al-Jolani,ha apoyado sin fisuras la intervención turca desde su cada vez más exiguo Califato de Idleb.
En el último y esperpéntico giro de la diplomacia estadounidense, el secretario de Defensa de EEUU, Mark Esper publicaba en Twitter una crítica inédita hacia los que hasta solo días eran descritos como los “rebeldes moderados” que combaten al sangriento régimen de Al Assad:
“Aunque los turcos nos dieron garantías de que las tropas estadounidenses no serían dañadas, las milicias sirias aliadas con ellas están recorriendo las carreteras y emboscando y atacando vehículos. Las milicias, conocidas como el Ejército Sirio Libre, están locas y no son confiables en absoluto”.
Al respecto, hemos escuchado hasta el hartazgo las críticas hacia la decisión de Trump de retirada de tropas estadounidenses, pero ninguna voz entre los expertos occidentales se ha atrevido a denominar esa presencia estadounidense como lo que es; la invasión y ocupación de un territorio perteneciente a un estado soberano miembro de la ONU como es la República Árabe Siria.
De igual manera se sigue ocultando la presencia ilegal de fuerzas estadounidenses en el sur de Siria (Al Tanf), protegiendo y patrocinando grupos yihadistas que tan solo se diferencian de DAESH por sus siglas.
Turquía es OTAN
Los medios pro-atlantistas olvidan resaltar también otro hecho capital: Turquía no solo es miembro de la OTAN, sino que constituye el ejército más numeroso de esta organización solo por detrás de su aliado, EE.UU.
Los expertos en Siria no cayeron anteriormente en la cuenta acerca de cómo era posible que Washington eligiese adoptar a un movimiento “libertario" (que oficialmente reconoce como una organización terrorista) sobre su aliado de la OTAN, Turquía. Incluso después del inicio de la Operación “Fuente de Paz" parecen seguir sin comprenderlo.
Incluso, desde el punto de vista militar, no parecían percibirse de las lecciones extraídas durante la campaña en la provincia de Afrin de Siria en 2018.
Resulto absolutamente claro que pese al entrenamiento y la gran cantidad de armamento recibido de EEUU, las posibilidades de que las SDF/YPG pudiera enfrentar con éxito la acometida de un ejército regular (perfectamente armado como el turco) eran casi nulas.
EEUU trató de presentar a las SDF como un verdadero ejército, pero el abandono de sus tradicionales tácticas de guerra de guerrillas rural y la adopción de tácticas regulares exponiéndose en terreno abierto firmó su sentencia durante la invasión turco-yihadista de Afrin en 2018.
Sin extraer esas conclusiones fundamentales y pese a que la amenaza turca de intervención ha sido una constante, los mandos de las SDF a sueldo de EEUU siguieron sin advertir el peligro y confiaron en el paraguas protector de Washington; una vez este ya no existe, las fuerzas kurdas estaban sentenciadas a la derrota total en enfrentamiento abierto con el Ejército y las fuerzas aéreas turcas que apoyan el avance de sus proxys yihadistas.
YPG no es marxista
Hasta el hartazgo hemos podido leer una y otra vez como se define al Partido kurdo sirio (PYD) y a sus ramas militares YPG/YPJ como marxista; nada más lejos de la realidad actual.
Mientras que algunos grupos trotskistas en Occidente apoyaron la oposición principal de los "árabes sirios" que se agruparon en torno a lo que se convirtió en el "Ejército Sirio Libre" (en España por ejemplo personajes de vileza moral tales como Alba Rico o Laila Nachawati) , los comunistas de los partidos más "ortodoxos" (los que apoyaron o al menos defendieron a la URSS y el bloque socialista hasta 1991) tendieron a apoyar al gobierno y al liderazgo sirio sobre la base de que el país era el objetivo de los intentos de cambio de régimen por parte de las potencias imperialistas occidentales, particularmente los Estados Unidos e Israel.
Lo cierto es que durante la guerra fría, el PKK fue un partido de los kurdos de Turquía vinculado a la Unión Soviética. Recurrió a la lucha armada contra la dictadura turca para obtener el reconocimiento de la cultura del pueblo kurdo. Pero entró en decadencia a partir del encarcelamiento en Turquía de su líder histórico, Abdullah Ocallan, en 1999, quien dirigió el movimiento desde 1978.
En aquel 1999, altos funcionarios norteamericanos indicaron que el gobierno de los Estados Unidos utilizó medios diplomáticos y de inteligencia para ayudar a Turquía a capturar a Ocallan. Según su propio relato, la diplomacia y los servicios de inteligencia de Washington contribuyeron a que Ocalan abandonara un refugio seguro en Siria, y a persuadir a varios países, uno tras otro, a no acordarle asilo.
El PKK también acusó a los servicios de inteligencia norteamericanos e israelíes de haber ayudado a Turquía a capturar a Ocalan con la complicidad de las autoridades de Grecia y de Kenya. (9)
Según el general Ilker Basbug, ex jefe del estado mayor turco, Estados Unidos logró infiltrarse en el PKK y trasladó su sede a Dinamarca. Desde entonces, el PKK cambió su ideología marxista-leninista por un anarquismo (municipalismo libertario) según el modelo delineado por el profesor estadounidense Murray Bookchin. En 2005, la sede de este nuevo PKK volvió clandestinamente a Turquía. (10)
De todo esto parecían haberse olvidado los militantes libertarios que tomaron las ruinas de Raqqah tras 5 meses de bombardeos estadounidenses, cuando mostraron grandes retratos de Ocalan en la plaza principal de la ciudad.
NOTAS:
(1) https://gizmodo.com/abc-news-broadcasts-fake-syria-bombing-video-thats-actu-1839028685
(2) https://actualidad.rt.com/opinion/alberto-rodriguez-garcia/329978-quienes-son-kurdos-turquia-ofensiva-siria
(3) https://www.theguardian.com/world/middle-east-live/2012/oct/25/syria-conflict-ceasefire-doubts-live
(4) https://www.ohchr.org/EN/NewsEvents/Pages/DisplayNews.aspx?NewsID=21370&LangID=E
(5) https://www.efe.com/efe/america/mundo/netanyahu-advierte-contra-la-limpieza-etnica-de-kurdos-por-turquia-en-siria/20000012-4084029
(6) http://www.aurora-israel.co.il/ex-ministra-de-israel-insta-a-crear-un-estado-kurdo
(7) https://www.bbc.com/mundo/noticias-internacional-41387299
(8) https://www.europapress.es/internacional/noticia-fds-completan-toma-raqqa-antigua-capital-estado-islamico-siria-20171017121700.html
(9) https://www.nytimes.com/1999/02/20/world/us-helped-turkey-find-and-capture-kurd-rebel.html
(10 https://www.voltairenet.org/article207938.html
Para quienes hemos tratado de seguir y comprender el conflicto sirio desde sus inicios en 2011 resulta desagradablemente sorprendente observar la cantidad de pseudo-expertos a sueldo aparecidos en los últimos días en medios de comunicación occidentales, exponiendo sus planteamientos y quejas al unísono; eso sí, únicamente desde el anuncio de retirada estadounidense anunciado por Trump y el inicio de la Operación Primavera de Paz puesta en marcha por Turquía y sus fuerzas yihadistas anexas.
Analizar la cuestión en profundidad (precedentes, causas, desarrollo y consecuencias finales) requeriría un artículo diferente y una minuciosa observación de la evolución de los acontecimientos por venir, más aún cuando Damasco ha comenzado a actuar en el norte de Siria tras alcanzarse un acuerdo con la dirigencia kurda.
Pero eso no entra dentro de los planes de estos “expertos" acostumbrados a “analizar y juzgar" complejas realidades geopolíticas a base de tuits y titulares sensacionalistas de más que dudosa objetividad, además de basarse en realidades artificialmente construidas por esos mismos medios.
La última y contundente prueba de la propaganda de guerra disfrazada de información puesta en marcha contra Siria desde hace 8 años la proporciona la cadena estadounidense ABC News, provocando las críticas directas de Trump ante la citada “noticia".
En el video, que el corresponsal extranjero de ABC Ian Panell afirmó haber sido "obtenido por ABC News", supuestamente se mostraban las "horribles atrocidades" de "Turquía y su bombardeo militar de civiles kurdos en una ciudad fronteriza siria ”.
En tiempo récord fue demostrado que se trataba del video de una exhibición militar filmado en Kentucky durante un evento llamado "Military Gun Shoot & Military Gun Show" y publicado en YouTube en 2017. (1)
La cruda realidad es que la formación de la opinión pública en Europa y América entorno al Medio Oriente se basa en la experta opinión de creadores de contenidos a sueldo cuya gran mayoría apenas podría situar Siria en un mapa sin ayuda de Google, no digamos aún cuando tratan de hablar de regiones o ciudades de las que jamás oyeron hablar hasta ahora y que en un futuro apenas volverán a ser nombradas cuando el interés de los que verdaderamente controlan esta “prensa libre" se fije en cualquier otro asunto.
Cabría una profunda reflexión al respecto; si es evidente que este montaje buscaba desacreditar a Trump, cabe preguntarse que no habrán hecho estos mismos medios en su campaña contra Siria. Sin embargo, dicha reflexión no aparece en ninguna de las columnas y opiniones de los “expertos" a sueldo ya que desmontaría todo el relato construido y fabricado desde 2011.
Por ello, este artículo no tratará de competir con la aguda sabiduría de los “expertos" a sueldo de The Washington Post, Al Jazeera, El País, ABC News, Sky, The Guardian o Infobae, por citar algunos.
En cambio, tratará de exponer la verdadera cara de los al parecer únicos protagonistas presentes en la región; los ángeles kurdos.
Cuando los kurdos apoyaban la “revolución”
Alberto Rodríguez García es uno de esos propagandistas que trabajan para el Kremlin a sueldo, a diferencia de los honrados periodistas pro-OTAN que hacen su trabajo de manera altruista y gratuita. El Parlamento Europeo ya se apresuró hace años a comparar la “propaganda de los medios rusos RT y Sputnik con la del Estado Islámico”.
Despojándonos del modo irónico ( el párrafo anterior), Rodríguez García resume rápidamente las hazañas de los “ángeles" kurdos:
“Las mismas YPG que ahora piden ayuda desesperadamente a Rusia y Siria, no dudaron en 2012 ser simples espectadoras mientras veían cómo el Ejército Árabe Sirio se desangraba en el norte. Son las mismas YPG que en 2013 abatieron a 376 y capturaron a 790 soldados del Ejército Sirio (y ningún rebelde).
Son las mismas YPG que ese mismo año intentaron expulsar a las autoridades sirias de Hasaka. Son las mismas YPG que en 2014 intentaron expulsar a las autoridades sirias de Qamisli. Son las mismas YPG que en 2015 crearon las Fuerzas Democráticas Sirias, forjando alianzas con los mismos grupos rebeldes que llevaban años combatiendo al ejército sirio. Algunos de estos grupos, como Jaysh Thuwar ar-Raqqa, Liwa al-Jihad fi Sabeel Allah o Liwa Owais al-Qorani por cierto, antiguos aliados de al-Qaeda y hasta ISIS.
Son las mismas YPG que en 2016 volvieron a intentar expulsar a las autoridades sirias de Qamisli y Hasaka, atacando directamente a los asirios locales. Son las mismas YPG que en 2017 se enfrentaron al Ejército Sirio en Tabqa. Son las mismas YPG que en 2018 cerraron escuelas y detuvieron a patriarcas asirios por no aceptar el modelo nacionalista kurdo que querían imponer a la población re-escribiendo la historia.
Son las mismas YPG que en 2019 ya habían entregado al menos 12 bases en el norte de Siria a Estados Unidos. Basta tener algo de memoria pues, para entender que el gobierno sirio "no se vea preparado para negociar con los grupos kurdos apoyados por EE.UU." (2)
Rojava
A la hora de presentar mapas e infografías, los mass media cometen sistemática y deliberadamente el mismo “error”.
Al mostrar dichos mapas y definir la zona controlada por EE.UU y sus aliados kurdos (que incluyen también instalaciones militares francesas que son también convenientemente olvidadas) se muestra la zona como una entidad única y continua rebautizada como “Rojava".
No solo se silencia la presencia militar francesa o británica, sino que se excluyen deliberadamente los enclaves que se han mantenido fieles a Damasco durante todos estos años, soportando el asedio no solo de DAESH, sino, principalmente, de las milicias kurdas que no han parado de tratar de arrebatar estas ciudades al gobierno sirio por todos los medios, incluidas operaciones militares contra las fuerzas leales al Gobierno sirio.
Hablamos de las ciudades de Qashmili y Hassaka, junto a algunas zonas rurales aledañas.
De hecho, habría que atribuir la mayor parte del mérito al heroico y difunto Mayor General Issam Zahreddine, al cual tras serle ordenada su presencia en Deir ez-Zor debido a la muerte del comandante general Jameh, se hizo conocido por visitar frecuentemente estos enclaves leales al gobierno sirio anclados en zona kurda contribuyendo decisivamente a detener la expansión de DAESH en esta zona y conseguir que aquellas zonas permanecieran leales, al menos en gran parte, a Damasco.
Es un hecho comprobable como casi todos los medios occidentales reproducen esta farsa acríticamente buscando presentar la zona ocupada por los kurdos como una entidad única y consolidada, prácticamente como un nuevo Estado independiente frente a la opinión pública occidental.
YPG en Alepo
De la misma manera, cuando se representa la zona controlada por el gobierno sirio, raramente se destaca la presencia tolerada de las YPG en Alepo, donde se asienta desde hace décadas la población kurda en torno al barrio de Seikh Masqoud.
Sobre su papel durante el prolongado asedio yihadista a Aleppo cabría definirlo, cuanto menos, de controvertido, pues básicamente se podría decir que se dedicaron en exclusiva a la defensa de su zona a partir de que los ataques yihadistas se intensificaron en dicha barriada al norte de Aleppo; antes de ello, mantuvieron en la práctica una “neutralidad" frente a los “rebeldes moderados" creyendo que podrían obtener algún beneficio futuro y mientras la población de Alepo sufría diariamente.
El relato de uno de estos “rebeldes moderados" en 2012 y recogido por The Guardian no deja lugar a la duda:
“Durante mucho tiempo, los distritos de al-Ashrafiyeh y Sheikh Maqsoud estuvieron bajo el control del PKK, que está en alianza con el régimen de Assad (ayuda a detener a los miembros de la FSA y los entrega al ejército sirio).
Al principio, no planeábamos abrir un frente desde esta dirección, quiero decir al-Ashrafiyeh, para evitar enfrentamientos con el PKK. Nuestro objetivo es el régimen.
El PKK había acordado no interferir y no apoyar a ninguna parte del conflicto. No atacamos a ningún miembro del PKK [hoy], de hecho se retiraron para despejar el camino para nosotros. Era un trato que sacarían antes de la llegada de la FSA. Los enfrentamientos fueron solo con el ejército sirio.
El PKK aceptó el acuerdo después de mucha presión del pueblo kurdo..”. (3)
Lo innombrable: Israel
Trump tiene razón en un aspecto; mantenerse en la región , en la actual coyuntura geopolítica, no es parte de los intereses estadounidenses. Lo que no se aventura a decir el Presidente estadounidense es que sus presencia sirve a los intereses de su verdadero aliado incondicional como es Israel.
La estrategia de fragmentación de los estados que rodean a Israel es una de sus máximas prioridades en materia de seguridad, entendiendo que pequeños estados fragmentados y organizados en base a caracteres étnico/confesionales, tenderían a enfrentarse entre ellos e imposibilitarían una gran alianza regional contra el supuesto enemigo común: el propio Israel.
En directa relación con lo citado, uno de los aspectos más oscuros y sistemáticamente ocultado por los medios occidentales es el proceso de kurdificación forzosa acaecido en el norte de Siria desde la implantación de la administración kurda en dichas zonas, con la descarada intención de configurar la creación de su hipotético futuro estado en base a criterios étnicos, un factor totalmente ajeno a la idiosincrasia de la República Árabe Siria desde su creación.
Antes de la guerra, los kurdos en Siria constituían menos del 10% de la población, mientras que antes de comenzar la invasión turco-yihadista, las YPG controlaban más del 30% del territorio sirio, con población predominantemente árabe y asiria.
Incluso las propias Naciones Unidas, mediante su Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos declaró en su Comisión Internacional de Investigación Independiente sobre la República Árabe Siria que "comunidades enteras han sido desplazadas por las unidades de protección del pueblo kurdo (YPG) o las fuerzas demócratas sirias (SDF)".(4)
Resulta revelador quien ha sido uno de los primeros defensores acérrimos de la causa kurda en condenar las operaciones turcas; el mismísimo Benjamín Netanyahu.
Advirtiendo sobre una posible "limpieza étnica" se prestó inmediatamente a prestar generosamente apoyo humanitario al pueblo kurdo.
"Israel condena firmemente la invasión turca de las áreas kurdas en Siria y advierte contra la limpieza étnica de los kurdos por parte de Turquía y sus aliados….Israel está preparado para prestar asistencia humanitaria al valiente pueblo kurdo", eso sí, sin especificar qué tipo de ayuda pudiera ofrecer Israel a las fuerzas kurdas del YPG / YPJ. (5)
Tal vez estuviera refiriéndose al tipo de asistencia humanitaria prestada en hospitales israelíes a los combatientes yihadistas del sur de Siria.
Aún con mayor claridad y rotundidad se expresaba la presidenta el partido de derecha Yamina, Ayelet Shaked, exministra de justicia de Israel (2015-2019) reiterando sin ambigüedades su apoyo al establecimiento de un Estado kurdo:
“Nuestra memoria nacional requiere que nos rebelemos contra la violencia dirigida contra otra nación. Tal es la violencia turca dirigida contra el pueblo kurdo en el norte de Siria. He dicho esto en el pasado: es de interés tanto para Israel como para los Estados Unidos, por la seguridad y la estabilidad de la región, que se establezca un estado kurdo”, recalcó.
“Los kurdos son la nación más grande del mundo sin país, con una población de aproximadamente 35 millones de personas. Son un pueblo antiguo que comparte una conexión histórica especial con el pueblo judío. Los kurdos en general, y especialmente los que viven en Turquía y el norte de Siria, son los más progresistas y occidentales de esa región. Son la fuerza principal que luchó contra el Estado Islámico (ISIS) y sufrió miles de muertes, bajo el especial liderazgo conjunto de hombres y mujeres. El mundo occidental debería estar con ellos”, concluyó. (6)
Esta acérrima defensa israelí no puede sorprender a nadie medianamente informado ( no es el caso de la mayor parte de la población en Europa o EE.UU) o familiarizado con la evolución de la causa kurda a lo largo de décadas.
Entre los 8,5 millones de israelíes que hoy viven en Israel se cuentan unos 200 000 de origen kurdo. En marzo de 1951, la Operación Ezra y Nehemías (cuyo nombre hace referencia a los personajes bíblicos que organizaron la fuga de los judíos de Babilonia) permitió a 11 000 kurdos judíos emigrar de Irak hacia Israel. Aquella operación fue financiada por el American Jewish Joint Distribution Committee de Nueva York y los aviones utilizados en el puente aéreo fueron proporcionados por el dictador cubano Fulgencio Batista.
En fechas más recientes, se relaciona directamente a Israel, entre otros, del intento secesionista kurdo en Iraq ; fue realizado allí un dudoso referéndum en septiembre del 2017 que obligó a Bagdad a intervenir.
Sin ningún otro apoyo explícito en el mundo, solo un país expresó su apoyo, no sólo al referendo, sino también a la posibilidad de un Kurdistán independiente: Israel.
Netanyahu, declaraba entonces que su país "apoya los esfuerzos legítimos del pueblo kurdo para conseguir su propio Estado.” (7)
Curiosamente, también añadía en su comunicado lo siguiente:
“Israel se opuso al PKK (acrónimo kurdo del Partido de los Trabajadores del Kurdistán) y lo ve como un grupo terrorista, igual que se opone a una Turquía que apoya a HAMAS”.
Poco más de 2 años después Netanyahu parece haber olvidado ese terrorismo, una vez entiende que el proyecto israelí para extender el Kurdistán iraquí desde Kirkuk hasta el Mediterráneo, ocupado y protegido por bases militares estadounidenses, está a punto de fracasar definitivamente.
DAESH como arma arrojadiza
Más allá de pasar por alto el hecho de que ex-militantes de DAESH fueran enrolados entre las propias fuerzas del YPG tras rendirse, otro de los argumentos favoritos de estos expertos en Oriente Medio es la amenaza de fuga de miembros de DAESH mantenidos bajo custodia por las SDF.
Un argumento poco contundente si tenemos en cuenta como el EAS lleva lidiando con los restos de DAESH diseminados por el desierto hasta el día de hoy. Sin la amenaza de ataques aéreos estadounidenses contra sus fuerzas, el EAS y sus aliados son perfectamente capaces de destruir completamente dicha amenaza. (Fue la fuerza aérea de la Coalición la que atacó al Ejército Árabe Sirio en Deir ez Zor en septiembre de 2016 favoreciendo claramente a DAESH).
Además, no es descartable la posibilidad de que las propias fuerzas kurdas hayan “facilitado" de una u otra manera la huida de miembros de DAESH como herramienta de presión ante la comunidad internacional.
Esta reflexión da pie para cuestionar otro de esos dogmas esparcidos por la prensa y los gobiernos occidentales que tratan de derrocar al régimen sirio desde 2011: los kurdos aliados de EE.UU fueron quienes derrotaron a DAESH.
Tomando por buena la cifra de 11.000 bajas kurdas en lucha contra DAESH ( en una guerra donde se supera ampliamente la cifra de 500.000 muertos), no es aventurado comparar esta propaganda con la tradición anglosajona de exaltar el limitado impacto del desembarco de Normandía durante la II Guerra Mundial a la vez que se menosprecia el decisivo e inestimable esfuerzo de guerra soviético durante ese mismo conflicto.
Lo cierto es que sus movimientos militares, dirigidos por mandos estadounidenses, estaban dirigidos a bloquear cualquier avance gubernamental y en controlar los pozos de gas y petróleo al norte del Éufrates, impidiendo que el estado sirio pueda disponer de todos sus recursos para la reconstrucción económica.
Quizás el mayor ejemplo es como las fuerzas de las SDF apenas fueron capaces de tomar Raqqah (antigua capital del Califato) después de 5 meses de intensos bombardeos de la artillería y aviación estadounidense, con la casi total destrucción de la ciudad y mediante un acuerdo final por el cual los yihadistas fueron evacuados de allí hacia Deir Er Zor para continuar luchando contra el EAS (Ejército Árabe Sirio). Como contraste, valdría comparar el modo en que el EAS recuperó la ciudad de Khan Sheikoun (Idleb) este verano. (8)
Por todo ello y más, establecer una comparación entre el papel del EAS y sus aliados (Rusia, Hezbolá e Iran) y el de las SDF en la derrota del terrorismo en Siria es simplemente inadecuado y falaz.
La última en sumarse a este esperpento no es sino Hillary Clinton retuiteando una publicación de un corresponsal de NBC sobre las atrocidades desatadas por la incursión de Turquía en Siria, insinuando que todo es culpa del presidente Trump.
"Este horror repugnante es culpa de un hombre" , tuiteó el sábado por la noche, comentando en un tuit de Richard Engel de NBC, quien dijo que los oficiales militares estadounidenses están preocupados de que la ofensiva turca "abra la puerta a AMBAS depuración étnica de los kurdos y el regreso del ISIS /Al Qaeda."
Como era de esperar los internautas no tardaron en destacar la hipocresía de quien admitió en su momento que EEUU creó Al Qaeda:
“Todo este terror en Siria ni siquiera estar sucediendo si no hubiera sido por ti, Obama, Brennan y el armado de McCain, la financiación, la formación y potenciación de Al-Qaeda e ISIS terroristas en un intento fanática a derrocar al gobierno sirio legítima”.
Invasiones turcas
Si debiéramos fiarnos únicamente de las publicaciones de la prensa europea, estadounidense o canadiense, pareciera que Turquía ha iniciado una intolerable agresión militar contra un Estado independiente y soberano formado y administrado por los kurdos y bautizado en aquellos lares como Rojava.
Lo único cierto es que se trata de una intolerable agresión militar contra la integridad territorial de un Estado independiente y soberano, la República Árabe Siria, perpetrado por un estado miembro de la OTAN y principalmente a través de mercenarios yihadistas patrocinados, armados y entrenados no solo por Turquía sino también por EE.UU, Francia o Reino Unido.
De la misma manera, se obvia que no es ni mucho menos la primera vez que ocurre puesto que la propia Turquía: hace ya años que algunos nos molestamos en observar como tras la invasión yihadista de Aleppo, las infraestructuras y equipos industriales de la otrora joya económica siria eran desmantelados y llevados a Turquía. O como a través de sus proxys yihadistas, ya invadió la región siria de Afrin en 2018.
Tampoco podemos olvidarnos como Turquía ha sido y sigue siendo, junto a EEUU y Reino Unido, el principal valedor de Al Qaeda en la todavía ocupada provincia siria de Idleb, donde incluso tras el espectacular avance del Ejército Árabe Sirio en el verano de 2019 existen posiciones fortificadas ocupadas por el propio Ejército turco que quedaron aisladas (Morek) en medio de aquella brillante ofensiva que los turcos y los medios de difusión occidentales trataron de detener y calificaron como un nuevo atropello del sangriento régimen sirio a los derechos humanos y en favor de los “rebeldes"; los mismos “rebeldes" que Turquía emplea como fuerza de choque ahora.
En sintonía, el máximo líder de Hayat Tahrir al-Sham (Al Qaeda), Abu al-Jolani,ha apoyado sin fisuras la intervención turca desde su cada vez más exiguo Califato de Idleb.
En el último y esperpéntico giro de la diplomacia estadounidense, el secretario de Defensa de EEUU, Mark Esper publicaba en Twitter una crítica inédita hacia los que hasta solo días eran descritos como los “rebeldes moderados” que combaten al sangriento régimen de Al Assad:
“Aunque los turcos nos dieron garantías de que las tropas estadounidenses no serían dañadas, las milicias sirias aliadas con ellas están recorriendo las carreteras y emboscando y atacando vehículos. Las milicias, conocidas como el Ejército Sirio Libre, están locas y no son confiables en absoluto”.
Al respecto, hemos escuchado hasta el hartazgo las críticas hacia la decisión de Trump de retirada de tropas estadounidenses, pero ninguna voz entre los expertos occidentales se ha atrevido a denominar esa presencia estadounidense como lo que es; la invasión y ocupación de un territorio perteneciente a un estado soberano miembro de la ONU como es la República Árabe Siria.
De igual manera se sigue ocultando la presencia ilegal de fuerzas estadounidenses en el sur de Siria (Al Tanf), protegiendo y patrocinando grupos yihadistas que tan solo se diferencian de DAESH por sus siglas.
Turquía es OTAN
Los medios pro-atlantistas olvidan resaltar también otro hecho capital: Turquía no solo es miembro de la OTAN, sino que constituye el ejército más numeroso de esta organización solo por detrás de su aliado, EE.UU.
Los expertos en Siria no cayeron anteriormente en la cuenta acerca de cómo era posible que Washington eligiese adoptar a un movimiento “libertario" (que oficialmente reconoce como una organización terrorista) sobre su aliado de la OTAN, Turquía. Incluso después del inicio de la Operación “Fuente de Paz" parecen seguir sin comprenderlo.
Incluso, desde el punto de vista militar, no parecían percibirse de las lecciones extraídas durante la campaña en la provincia de Afrin de Siria en 2018.
Resulto absolutamente claro que pese al entrenamiento y la gran cantidad de armamento recibido de EEUU, las posibilidades de que las SDF/YPG pudiera enfrentar con éxito la acometida de un ejército regular (perfectamente armado como el turco) eran casi nulas.
EEUU trató de presentar a las SDF como un verdadero ejército, pero el abandono de sus tradicionales tácticas de guerra de guerrillas rural y la adopción de tácticas regulares exponiéndose en terreno abierto firmó su sentencia durante la invasión turco-yihadista de Afrin en 2018.
Sin extraer esas conclusiones fundamentales y pese a que la amenaza turca de intervención ha sido una constante, los mandos de las SDF a sueldo de EEUU siguieron sin advertir el peligro y confiaron en el paraguas protector de Washington; una vez este ya no existe, las fuerzas kurdas estaban sentenciadas a la derrota total en enfrentamiento abierto con el Ejército y las fuerzas aéreas turcas que apoyan el avance de sus proxys yihadistas.
YPG no es marxista
Hasta el hartazgo hemos podido leer una y otra vez como se define al Partido kurdo sirio (PYD) y a sus ramas militares YPG/YPJ como marxista; nada más lejos de la realidad actual.
Mientras que algunos grupos trotskistas en Occidente apoyaron la oposición principal de los "árabes sirios" que se agruparon en torno a lo que se convirtió en el "Ejército Sirio Libre" (en España por ejemplo personajes de vileza moral tales como Alba Rico o Laila Nachawati) , los comunistas de los partidos más "ortodoxos" (los que apoyaron o al menos defendieron a la URSS y el bloque socialista hasta 1991) tendieron a apoyar al gobierno y al liderazgo sirio sobre la base de que el país era el objetivo de los intentos de cambio de régimen por parte de las potencias imperialistas occidentales, particularmente los Estados Unidos e Israel.
Lo cierto es que durante la guerra fría, el PKK fue un partido de los kurdos de Turquía vinculado a la Unión Soviética. Recurrió a la lucha armada contra la dictadura turca para obtener el reconocimiento de la cultura del pueblo kurdo. Pero entró en decadencia a partir del encarcelamiento en Turquía de su líder histórico, Abdullah Ocallan, en 1999, quien dirigió el movimiento desde 1978.
En aquel 1999, altos funcionarios norteamericanos indicaron que el gobierno de los Estados Unidos utilizó medios diplomáticos y de inteligencia para ayudar a Turquía a capturar a Ocallan. Según su propio relato, la diplomacia y los servicios de inteligencia de Washington contribuyeron a que Ocalan abandonara un refugio seguro en Siria, y a persuadir a varios países, uno tras otro, a no acordarle asilo.
El PKK también acusó a los servicios de inteligencia norteamericanos e israelíes de haber ayudado a Turquía a capturar a Ocalan con la complicidad de las autoridades de Grecia y de Kenya. (9)
Según el general Ilker Basbug, ex jefe del estado mayor turco, Estados Unidos logró infiltrarse en el PKK y trasladó su sede a Dinamarca. Desde entonces, el PKK cambió su ideología marxista-leninista por un anarquismo (municipalismo libertario) según el modelo delineado por el profesor estadounidense Murray Bookchin. En 2005, la sede de este nuevo PKK volvió clandestinamente a Turquía. (10)
De todo esto parecían haberse olvidado los militantes libertarios que tomaron las ruinas de Raqqah tras 5 meses de bombardeos estadounidenses, cuando mostraron grandes retratos de Ocalan en la plaza principal de la ciudad.
NOTAS:
(1) https://gizmodo.com/abc-news-broadcasts-fake-syria-bombing-video-thats-actu-1839028685
(2) https://actualidad.rt.com/opinion/alberto-rodriguez-garcia/329978-quienes-son-kurdos-turquia-ofensiva-siria
(3) https://www.theguardian.com/world/middle-east-live/2012/oct/25/syria-conflict-ceasefire-doubts-live
(4) https://www.ohchr.org/EN/NewsEvents/Pages/DisplayNews.aspx?NewsID=21370&LangID=E
(5) https://www.efe.com/efe/america/mundo/netanyahu-advierte-contra-la-limpieza-etnica-de-kurdos-por-turquia-en-siria/20000012-4084029
(6) http://www.aurora-israel.co.il/ex-ministra-de-israel-insta-a-crear-un-estado-kurdo
(7) https://www.bbc.com/mundo/noticias-internacional-41387299
(8) https://www.europapress.es/internacional/noticia-fds-completan-toma-raqqa-antigua-capital-estado-islamico-siria-20171017121700.html
(9) https://www.nytimes.com/1999/02/20/world/us-helped-turkey-find-and-capture-kurd-rebel.html
(10 https://www.voltairenet.org/article207938.html
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