martes, 2 de julio de 2019

La mejor serie de la Historia; propaganda con cuota de suscripción


"Nunca odies a tus enemigos, afecta tu razón y no te permite juzgarlos".

Es el consejo que Michael Corleone (Al Pacino) ofrece que su sobrino Vince (Andy Garcia) en la tercera y última parte de la mítica saga cinematográfica de El Padrino.

Siguiendo esta máxima, hoy en día deberíamos descubrirnos ante el talento y la pericia de los creadores y promotores de propaganda anglosajones ( también llamados productores, guionistas, directores etc..) por conseguir que, masiva y voluntariamente, los consumidores de esos contenidos no solo continúen consumiendo ávida, ferviente e incondicionalmente sus productos, sino que ahora paguen por ello cuando durante décadas han sido bombardeados de forma constante y gratuita con un flujo inagotable de retórica propagandística dirigida contra el enemigo del momento, ya fuese la URSS, Cuba, Iran, Iraq, Yugoslavia, China o, como en el momento actual Rusia.

En el mundo actual, el potencial de la propaganda ha alcanzado su cénit en el seno de la sociedad de la Información y de la Comunicación, constituyéndose en una gigantesca industria capaz de poner en marcha procesos propagandísticos de influencia global y general sobre las sociedades.

A día de hoy, el nivel de penetración de la colonización cultural anglosajona en sociedades supuestamente avanzadas y educadas como las europeas, ha alcanzado un grado de apogeo que posiblemente no llegó a alcanzarse siquiera durante la Guerra Fría.

Y como referíamos anteriormente, lo ha hecho además en la forma más neoliberal posible, es decir, mediante mercancía (propaganda) que el fanático espectador está dispuesto a pagar por consumir. Los clientes que compran los contenidos de estas corporaciones para consumirlos de manera doméstica, lo hacen de forma voluntaria para no sentirse excluidos socialmente de unos gustos estereotipados y fabricados para uniformar el pensamiento y el comportamiento de la opinión pública.

De lo que no parecen ser conscientes es de que el mundo está en guerra y está nueva forma de propaganda es un arma extremadamente valiosa en uno de los campos clave de esta guerra híbrida en la que estamos inmersos; la guerra de la información.

Debemos admitir que el sueño perfecto del tipo de propagandista anglosajón tan indisolublemente ligado al mundo corporativo está en su cénit; su propaganda llega a más lugares del mundo que nunca, de forma más inmediata que nunca, y con unos beneficios económicos astronómicos. Al fin y al cabo, en el mundo libre occidental las corporaciones son capaces de derrocar gobiernos incómodos; ITT, Pepsi-Cola, Chase Manhattan Bank y Anaconda fueron los principales promotores del golpe contra Allende en Chile (1973) (1) y United Fruit acabó con Jacobo Arbenz en Guatemala, sólo por poner un par de ejemplos.

Occidente está en guerra contra la Historia

En la guerra híbrida actual, un país designado como rival geopolítico se convierte en objetivo de toda la maquinaria propagandística disponible.

Solo es necesario observar la realidad mundial actual para comprobar que, en efecto, se hace uso de todo el arsenal disponible. Estas guerras se plasman en tres vertientes principales; la guerra económica, la presión militar aún sin enfrentamientos abiertos y directos sino mediante “proxys” y la guerra de la información, que busca tanto desestabilizar al enemigo de forma interna como a sus aliados.

Y la guerra de la información y la propaganda incluye la reinterpretación de los hechos históricos , en un momento en el que hemos superado el umbral del revisionismo histórico para encumbrar directamente a la Historia-ficción como verdad global para el siglo XXI.

¿Sueñan los diseñadores de la estrategia de la guerra de la información con que Netflix, Disney o HBO contribuirán a “subyugar” a Rusia, Irán, Venezuela o China ? Todo apunta a que sí. Ciertamente no se da puntada sin hilo ni se desperdicia un solo minuto de exhibición, buscando exprimir al máximo el potencial ideológico de sus contenidos en un momento de máximo auge de las “nuevas" formas de comunicación política y social.

Una apuesta lógica desde el punto de vista corporativo (expansión del negocio en una coyuntura favorable) y que se alimenta del paupérrimo nivel cultural que tanto propagandistas como consumidores han alcanzado las sociedades occidentales actuales; en definitiva, disciplinas como la Historia o la Literatura se han visto superadas por el impacto y la inmediatez del espectáculo audiovisual; ¿para que leer si existe una alternativa cómoda y directa en YouTube o HBO que, además de entretenernos, también nos “informa"?

Es en este escenario de decadencia cultural e ideológica donde políticos del nivel de Donald Trump, Jair Bolsonaro, Bukele o Vox en España, han logrado el éxito, precisamente sirviéndose de corporaciones estadounidenses como Facebook, WhatsApp, Twitter o YouTube, muy alejadas de la supuesta imagen de neutralidad y transparencia que pretenden proyectar.

En éste caldo de cultivo se alcanza el paroxismo y la irracionalidad con noticias como ésta, seguramente impensables hace solo unos años; el equipo de fútbol español Móstoles Balompié, que este año subió a Tercera división, ha cambiado su nombre por Flat Earth FC para reivindicar que la Tierra es plana, según lo anunció en un comunicado emitido en su página web y en un video publicado en YouTube.(2)

Chernóbil

No se trata de profundizar en los hechos acaecidos en Chernóbil en abril de 1986. Pese a que para la mayoría de la población parece ser un hecho recién descubierto gracias a una serie de ficción emitida en una plataforma de pago, hay abundantes testimonios y documentación sobre el hecho.

Por ejemplo, los fanáticos de la serie pueden acudir a fuentes cubanas, país que trata con los damnificados del suceso desde hace décadas sin promoción ni cobertura cinematográfica alguna. Personalmente, quien escribe estas líneas abandonó su visionado a los 12 minutos, cuando de manera ridícula y sin el menor rubor se muestra que no había dosímetros disponibles en la central nuclear en el momento del accidente, salvo uno guardado en una caja fuerte al que los trabajadores de la central no tienen acceso.

Es significativo que en cualquiera de las películas y series hollywoodenses con las que nos saturan diariamente, aquellos que sacrifican su vida por los demás o por la Patria son presentados como héroes; en la famosa serie, militares, policías, bomberos, voluntarios, médicos etc.. que ofrecieron su vida en aquella tragedia, son presentados como carne de cañón utilizada por la inhumana y despiadada burocracia soviética.

Es decir, un joven marine caído en Iraq defendiendo los intereses de Halliburton o Exxon es un héroe; un liquidador soviético de Chernóbil es un borrego sin decisión propia enviado a la peor de las muertes por el tiránico gobierno soviético.

Con una lógica tan infantilmente descarada, la campaña de marketing alrededor de la denominada como “ mejor serie de la Historia" resulta tan habitual como sospechosa. La temática, la coyuntura geopolítica mundial más actual y la procedencia de quienes la facturan la convierte aún en más sospechosa.

Buceando un poco en la actualidad mundial se comienzan a conectar cabos. Sucede sin embargo, que no por casualidad, estas nuevas formas de ocio absorben una cantidad ingente de tiempo de sus consumidores, recurriendo a tramas interminables que garantizan la fidelización de un cliente que mantiene sus suscripción a lo largo del tiempo; sobra decir por tanto a qué no se dedica el tiempo que absorben las intrigantes tramas.

Para los medios occidentales no hay discusión;

-“El realizador sueco Johan Renck logra reproducir fielmente el tétrico y opresivo ambiente de la URSS, entre otras razones grabando en Ucrania y en una antigua central nuclear soviética en Lituania, equipada con los mismos reactores RBMK de Chernobyl.”

-“Chernobyl se ha situado como la serie mejor valorada de la historia en páginas especializadas como IMDB y la crítica ha ensalzado lo bien escrita que está”.

Un realizador sueco, que como admite la responsable de vestuario Odile Dicks-Mireaux, dió la directriz de que quería un “vestuario feo”. Eso liberaba, según la diseñadora, de tener que crear looks de estrellas. A Jared Harris, uno de los protagonistas, le preguntaron qué color no le gustaba y respondió que el beige. Viste de beige durante toda la serie. La paleta cromática de la serie oscila entre todos los tonos posibles de beige, azul, marrón y gris.

Reconoce también que en la serie "han añadido algo de decadencia" y "la ropa es más de la URSS que la de entonces de Pripyat, donde se veían vaqueros, zapatos de colores y ropa que estaba llegando del extranjero". (3)

La innovación es nula y la técnica nada novedosa, ya utilizada, por ejemplo, en la película “La vida de los otros”, en la cuál los colores son brillantes y alegres si la escena transcurre en Alemania Occidental, o tristes y apagados si las imágenes correspondían a la Alemania Oriental.

Recreando con veracidad

Su guionista, Craig Mazin, estaba especializado en segundas y terceras partes de comedias de dudoso gusto (Scary Movie 3 y 4 y la segunda y tercera parte de Resacón en Las Vegas ). Desgraciadamente, todo apunta a que la versión de los hechos sobre Chernóbil que perdurará en la memoria de los consumidores será la escrita por un personaje qué, hablando sobre una catástrofe de tal magnitud y sobre su paso de la comedia a Chernóbil, declara que no existe mucha diferencia: "Hay algo necesario para cierto tipo de comedia, y es la apreciación por la verdad, no importa cómo de negra o molesta sea". (4)

En el siglo XXI este tipo de personajes a sueldo son los que se están encargando de remodelar la Historia, convertirla en un producto de propaganda absolutamente partidista y, finalmente, vendérsela a un consumidor que paga ansiosamente por “devorar" esos contenidos.

Entretanto, sigue desprestigiándose y desautorizándose el criterio de verdaderos historiadores que no trabajan a sueldo de grandes corporaciones audiovisuales puestas al servicio de la agenda exterior de Washington.

Craig Mazin
Estos gurús creadores de la industria del entretenimiento han logrado, apoyándose en generosos presupuestos, elaborar un formato adecuado al público actual, logrando que su versión cinematográfica destinada a generar beneficios para su corporación desacredite o al menos margine a cualquier debate o investigación sobre los hechos. Sólo la decadencia cultural occidental, mediante un espectáculo dramático y frívolamente tratado, podría hacer posible que un producto televisivo imponga su criterio ante la Historia y ante la Ciencia.

Si obviamos las fantasías creadoras de los guionistas, la supuesta referencia fundamental para la documentación de la serie procede básicamente del libro “Voces de Chernóbil: crónica del futuro”, de la premio Nobel bielorrusa Svetlana Alexiévich.

Sin entrar en valoraciones de su obra, el pensamiento de esta señora lo resume ella misma en una reciente entrevista (5):

“La situación política en los tres países eslavos que sufrieron Chernóbil varía. Opina Alexiévich que, en Bielorrusia, la principal preocupación del presidente, Alexandr Lukashenko —en su cargo desde 1994—, es “conservar el poder”; en Rusia impera una “política militarista” y en Ucrania se abre paso una “nueva conciencia”, aunque la tarea del nuevo presidente, Volodimir Zelenski, se ve dificultada por los nacionalistas radicales.

A la Nobel le gusta Zelenski. “También me gustaba Petró Poroshenko, pero me decepcioné cuando supe de su apego por el dinero. No creo que Zelenski esté en la presidencia para enriquecerse, creo que quiere sinceramente hacer algo. Es un personaje moderno y no necesita que la gente cuelgue sus retratos en el despacho.”

Busquemos ahora elegir tan sólo un ejemplo acerca de la visión de un medio de comunicación de masas con respecto a esta serie.

El periódico español El País afirma que:

 “..Expertos en la materia, historiadores y gente que vivió de primera mano la catástrofe han coincidido en que la serie refleja de una manera muy veraz todo lo ocurrido”.(6)

“...los héroes de la serie no son solo aquellos que se lanzaron a tratar de apagar el fuego, los liquidadores que fueron las primeras víctimas del desastre, sino los que dicen la verdad, los que no tienen miedo a romper el espeso silencio que se impone en las dictaduras. Se trata de dos científicos, Valery Legasov y Ulana Khomyuk, interpretados por los siempre magníficos Jared Harris y Emily Watson,que se niegan a aceptar la famosa frase de Piatakov, uno de los compañeros de primera hora de Lenin: "Si el Partido se lo exige, un auténtico bolchevique está dispuesto a creer que el negro es blanco y que el blanco es negro".(7)

De una manera tan veraz que la propia serie muestra en el epílogo que una de sus principales protagonistas no existió. El personaje de Ulana Khomyuk (Emily Watson) fue creado de la nada.

Otras licencias reconocidas son el testimonio de Legasov en el juicio en el episodio final de Chernobyl, añadiendo dramatismo e intriga de manera puramente cinematográfica. Sin embargo es ficción, ya que jamás acudió a testificar. Lo hicieron otros científicos en un intento por explicar lo sucedido.

O la alarmante predicción de la inventada Ulana Khomyuk, hablando en una escena de la posibilidad de que se produzca una segunda explosión, con una fuerza de "entre dos y cuatro megatones" y que sería letal para toda la población de Kiev y gran parte de la de Minsk. Según sus palabras tendría un impacto en una gran parte de Europa: "la Ucrania soviética, Letonia, Lituania, Bielorrusia, Polonia, Checoslovaquia, Hungría, Rumania y la Alemania Oriental". (8)

No se desaprovecha un segundo de rodaje; son los países (excepto Bielorrusia) a los que el establishment estadounidense señala como objeto de protección por su parte frente a la “amenaza rusa".

Guionistas por la verdad

La verdad es el tema principal de la serie, afirma orgulloso el guionista de comedia Mazin en una entrevista en Slate. También puntualiza que cualquier relación con la actual situación geopolítica entre EE UU y Rusia es casual.

Mazin resulta esclarecedor con sus opiniones (9):

“La dicotomía es que el sistema soviético era terrible, criminal, asesino y opresivo. Y el pueblo soviético fue notable. Lo que soportaron es simplemente asombroso. Estamos hablando de una nación que perdió no más de lo que lo hicimos en la Segunda Guerra Mundial, sino mucho más. Decenas de millones de personas. Decenas de millones.”

Pregunta: Cuando estaba creciendo en la década de 1980, los maestros se saltaron la parte de la URSS en la Segunda Guerra Mundial…

“Saltamos por encima de éllo. Está bien. Nos saltamos tambien cuántas personas resultaron heridas por la Revolución Rusa. Nos saltamos el impacto de la Primera Guerra Mundial. Nos saltamos la Segunda Guerra Mundial. Nos saltamos el Holodomor, el hambre de Stalin en Ucrania. Pero lo soportan todo. Ellos soportan todo eso, solo para obtener a Chernobyl. Y todavía perduran. Eso, creo, es simplemente extraordinario. Son una gente increíble. Gobierno terrible. La URSS fue un gobierno terrible. Pero la gente era, y sigo creyendo, maravillosa. La pregunta es, ¿podemos de alguna manera lograr sobrevivir a estos líderes para que podamos ser amigos?”.

 Pregunta: Las últimas palabras habladas en Chernobyl son "el costo de las mentiras", que es también la frase clave en la primera escena de la serie. ¿Qué fue tan importante acerca de esa idea para ti?

 “Bueno, estamos experimentando algo ahora que solía pensar que era principalmente un fenómeno en un lugar como la Unión Soviética, que es una desconexión de la verdad.”

No todas las críticas son excelentes

Evidentemente, no todo el mundo coincide con la corriente mainstream de alabanzas a la denominada “mejor serie de la Historia “.

El partido Comunistas de Rusia pretende abrir un caso penal contra los creadores de Chernobyl y prohibirles la entrada en Rusia :

-"En la serie Chernobyl, una auténtica tragedia se ha convertido en objeto de manipulación ideológica por parte de la cadena HBO. La serie de televisión sobre los dramáticos acontecimientos de abril de 1986 es una herramienta ideológica diseñada para desprestigiar y demonizar la imagen de los dirigentes y del pueblo soviético", señaló la nota.

 -"Un muro de mentiras; la miniserie sobre Chernóbil es una excelente arma de propaganda", escribió Andréi Sidorchik en el semanario ruso Argumenty i Fakty. (10)

Mientras, con el título "Chernóbil se cura en La Habana: El episodio que no contó HBO", el sitio oficial Cubadebate cuestionó que la producción televisiva no mencionara la participación de Cuba en la atención de unos 23.000 niños afectados por la radiación derivada del accidente.

Según el artículo, "desde mucho antes de que HBO redescubriera la historia de Chernóbil para una audiencia global, cualquier cubano de a pie ya sabía dónde ubicar la central nuclear en el mapa y explicar, en algunos casos de primera mano, las consecuencias de lo que allí ocurrió. Herencias del internacionalismo proletario."(11)

La Ucrania actual de la que no se hacen series

La mejor serie de la Historia fue grabada en localizaciones en Lituania y Ucrania.

Pero la superficialidad de la producción, destinada por una parte a vender su producto y por otra a denigrar todo lo que tenga relación con la antigua URSS, olvida convenientemente lo que no interesa recordar de aquel ente malévolo e inhumano.

 Que ocurrió en la URSS tras el desastre? Entre otras cosas, no sucedió el olvido y el abandono hacia los héroes y las víctimas que sugiere la producción, sino que la memoria se mantuvo viva hasta hoy, no como en Occidente donde la mayoría de los fans ni siquiera saben situar a Ucrania en un mapa.

La serie, una vez sembrado su mensaje, no se preocupa de que fue de aquellas personas, muchas de ellas tratadas en Cuba de manera gratuita y solidaria, algo que si extrapolaramos a países como EE.UU o Reino Unido jamás hubiese ocurrido.

Es más, en la Ucrania independiente surgida tras la disolución soviética, se mantuvieron los homenajes…pero nada más.

En 2011, por ejemplo, Ucrania homenajeó a los liquidadores de Chernóbil en el 25.º aniversario. Sin embargo laos reclamos de aquellos héroes no parecen haber sido objeto necesario de atención por parte de los creadores de la mejor serie de la Historia.

“Cuando existía la Unión Soviética, nos cuidaban, nos curaban, se ocupaban de nosotros. Ahora los gobiernos nos han olvidado”, se quejaba ayer un veterano bombero ucraniano, Georgui Nagayevski, vestido con uniforme verde y cubierto de medallas de todos los colores. “Lo que queremos es más ayuda y no sólo homenajes”, apunta Leonid Kastrikin. “Las medicinas cada año son más caras. Y mejores pensiones, porque recibimos dos o tres tratamientos cada año”.(12)

La Ucrania actual, liberada del yugo soviético y amenazada por la “agresión rusa", no es necesariamente un tema a tratar en la serie; sin embargo resulta revelador comparar el desarrollo de los recientes acontecimientos en aquel país con las declaraciones e ideas ya expuestas por los creadores de la serie.

HBO y Sky hacen en la pantalla lo que los ultranacionalistas ucranianos y la legislación de la Rada ucraniana practican en la calle; borrar y denigrar la memoria soviética y reelaborar su Historia para adecuarla a su ideología.

En 2015 la Rada Suprema (Parlamento) aprobó una ley que prohibió toda la simbología soviética en el país, el Partido Comunista fue prohibido y se dió inicio a una campaña para derribar todas las estatuas relacionadas con la URSS que aún existían en el país.

Esta ley ha obligado ya a todas las autoridades locales a cambiar los nombres de más de 50.000 calles de las ciudades del país, demoliéndose todas las estatuas de Lenin, al tiempo que casi 1.000 poblaciones han tenido que cambiar de nombre, y han derribado más de 1.200 monumentos.


En la calle, a principios de junio de 2019, neonazis ucranianos derribaron un busto del Mariscal Gueorgui Zhúkov, el más importante de la Unión Soviética durante la Segunda Guerra Mundial, en la ciudad de Járkov, la más importante del este del país. (13)

A finales de 2018, sin reacción de la democrática comunidad internacional, Ucrania designó el cumpleaños del colaborador nazi Stepan Bandera como día festivo nacional.(14)

Además, en la nueva Ucrania liberada del obscurantismo soviético, su Comité Estatal de Televisión y Radio prohibió el “Libro de los ladrones” del historiador sueco Anders Rydell, que incluye un análisis crítico de las acciones de Symon Petliura, otro ultra-nacionalista de principios del siglo XX, responsable de innumerables crímenes a partir de 1919.

En Kiev, fue cambiado el nombre de la calle dedicada al general del Ejército Rojo, Nikolái Vatutin, veterano de Stalingrado y que liberó Kiev, para dársela (a propuesta del partido fascista Svoboda) al general Román Shujiévich.

Shujiévich dirigió el batallón "Nachtigall" de la Wehrmacht, formado por ucranianos al servicio de la Alemania nazi. En octubre de 1941, con la URSS invadida por Alemania, compartía el mando del 201° Batallón de la policía auxiliar ucraniana, participando en marzo de 1942 en las actividades anti-partisanas en Bielorrusia.

Desde diciembre de 1943, Shujiévich es ya el jefe supremo del Ejército Insurgente Ucraniano(UPA). Tras la derrota alemana, continúa su guerra por la independencia de Ucrania contra la Unión Soviética. En 1950 muere en combate contra unidades especiales del NKVD dirigidas por Pável Sudoplátov, quien también había organizado el asesinato de Lev Trotski.

Más lecciones de HBO

En Rusia, muchas voces han detectado otro mensaje “inocente y solidario" que destila la producción; sembrar la duda sobre si la industria nuclear rusa es fiable, en momentos donde la corporación nuclear estatal rusa ROSATOM desarrolla decenas de proyectos en el extranjero y aspira a más en el futuro.

No se trata, como dicen sus creadores, de ofrecer un mensaje ecologista y antinuclear, sino de apuntar a la industria nuclear rusa, heredera de la soviética.

¿Por qué la serie insistiría ahora en que energía nuclear es tan peligrosa, pero no hace 8 años cuando se produjo el “olvidado" desastre de Fukushima?

Entre otras cosas porque, como anunció el Sr. Wang Shoujun, presidente de China National Nuclear Corp (CNNC), de propiedad estatal, China pretende construir hasta 30 reactores nucleares en el extranjero a través de su participación en la Iniciativa "Belt and Road" durante la próxima década; dichos proyectos nucleares de La Ruta de la Seda, podrían hacer ganar a las empresas chinas hasta un billón de yuanes (197.000 millones de dólares) para 2030. (15)

Fukushima

En Japón hay quien espera una serie sobre el único uso militar de armas atómicas de la Historia acaecido durante la Segunda Guerra Mundial.

Pero hablando de desastres nucleares acaecidos hace 8 años (no 74 como Hiroshima o Nagashaki o 33 como Chernóbil) los productores no parecen verse atraídos a hacer una serie sobre Fukushima, sobre los engaños de TEPCO y del gobierno nipón, sobre los trabajadores extranjeros temporales contratados para su limpieza, sobre el falseo de los datos de expansión de la radiación, el regreso forzado de habitantes a la región criticado incluso por la ONU o sobre que papel jugó aquel portaaviones estadounidense que operó alrededor de la central de Fukushima en los primeros momentos de la catástrofe…sinceramente, parecen ingredientes interesantes para filmar otra serie de éxito y sin necesidad de inventarse vestuarios ni trucos de luces y colores.

Parece ser que Fukushima es un desastre nuclear menor sin importancia y conveniente olvidado por la prensa y la industria occidental del entretenimiento; sin embargo, el 28 de marzo de 2018, el diario Japan Times informó de un estudio que calculaba en 2 billones de becquerelios por día la contaminación que la Unidad 1 enviaba al Océano Pacífico. En la misma noticia se explicaba que otro estudio, éste del año 2016, de una entidad confusa, Integrated Environmental Assessment and Management, concluía que “los niveles de radioactividad en la biota marina cerca de Fukushima fueron más bajos de lo previsto”. (16)

Una última casualidad (aunque recordemos que como aclara el guionista Mazin, cualquier relación con la actual situación geopolítica es casual ) es el expediente iraní ; otra vez por mera coincidencia, la emisión de la mejor serie de la historia coincide con los reclamos estadounidenses a Irán sobre el aspecto nuclear.

No es ninguna coincidencia, se denomina ley de la preparación y es uno de los principios psicológicos básicos del aprendizaje. Para finalizar el asunto, hay quien en España sigue esperando no ya una estúpida serie de un canal de pago, sino una verdadera actuación sobre los efectos de otro desastre nuclear sin publicidad como fue el ocurrido un 17 de enero de 1966, y en el que dos aviones de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos colisionaron en vuelo provocando el desprendimiento y la caída de las cuatro bombas termonucleares que transportaba el B-52 en suelo español.

Las otras mejores series, videojuegos, películas y cómics de la Historia

Durante los tiempos de la Guerra Fría, la CIA y el MI-6 gastaron verdaderas fortunas en la difusión de su propaganda psicológica, crearon infraestructuras y redes de informantes en el bloque socialista, gastaron miles de millones de dólares en sobornos y operaciones de sabotaje y establecieron un férreo control informativo en el Mundo Libre logrando el control total de la opinión pública.

En la sociedad globalizada actual, un ex-director adjunto de la CIA como David S. Cohen ( director adjunto de la CIA entre 2015 y 2017) se dedica a hacer apariciones como extra en la última temporada de la afamada serie 'Juego de Tronos'. (17)

Cohen participó como actor puesto que uno de los creadores de la serie, David Benioff, es su cuñado. No solo ex-directores de la CIA se pasean como actores por las pantallas…¡sino que quien lo disfruta ha pagado previamente por ello!.

Los creadores de propaganda a la carta tampoco desdeñan el formato tradicional de cine para ahondar en sus objetivos. Buen ejemplo son las películas Operación Chromite ( una edulcorada e infantil visión de la Guerra de Corea que insulta al conocimiento histórico) o la película “Kursk”, que no trata sobre la mayor batalla de tanques de la Historia y que significó el principio del fin para la Alemania nazi en 1943, sino sobre el hundimiento del submarino ruso Kursk en agosto del 2000.

Su director, el danés Thomas Vinterberg se expresaba así (18):

 “¿Por qué es importante una película sobre la tragedia del 'Kursk' ahora?

...aquella tragedia es esencial para entender qué pasa hoy en Rusia. Antes del desastre había esperanza para el país, que se estaba abriendo al exterior y daba espacio a la prensa libre. Después de él, todo eso se fue a pique. Por eso Rusia vuelve a vivir en estado de guerra fría.

¿Cómo se entiende lo que sucedió?

Las autoridades rusas se negaron a aceptar la ayuda internacional; privilegiaron el orgullo nacional y los secretos militares por encima de las vidas de sus soldados. En Occidente hay una apreciación muy clara del individuo, pero en Rusia prima la idea de la colectividad.

Para usted 'Kursk' no es un proyecto personal sino, como suele decirse, un encargo. ¿Qué lo llevó a aceptarlo?

La rabia que sentí al documentarme sobre la tragedia me recordó a la que sentía en los 70, cuando salía a manifestarme con mis padres contra las plantas nucleares y contra la guerra. Sentí que hacer la película era una forma de seguir alzando la voz. 'Kursk' es su película más 'mainstream'.

¿También su vía de entrada en Hollywood?

Para nada. Después de todo, no habla de superhéroes.”

No parece necesario añadir nada más sobre el pensamiento y las intenciones de este director, salvo quizás algo que ronda en la cabeza de muchos españoles y donde también aparecen ucranianos implicados. En Turquía, un 26 de mayo de 2003, un avión Yak-42 con 62 militares españoles fallecieron junto a doce tripulantes ucranianos.

En la misma línea, es de suponer que existe una gran cantidad de argentinos que desearían saber algo más sobre el naufragio del submarino ARA San Juan, aunque fuese a través de una serie de TV de pago.

Los yihadistas oscarizados de Netflix

El supuesto éxito de la serie Chernobil no es, en absoluto, un fenómeno nuevo. Cíclicamente, y en virtud de las necesidades propagandísticas del momento, surgen las “mejores películas, series o documentales de la Historia".

Cabe esperar que el dinero invertido en la promoción y en la compra de “prestigiosas críticas " obtenga su fruto en un futuro próximo, como ya hemos podido observar con similares fenómenos de marketing recientes.

Y es que sólo fue en 2017 cuando Netflix triunfó en la categoría de Oscar al mejor documental corto por "The White Helmets", una pieza de auto propaganda de 40 minutos sobre los yihadistas denominados en Occidente como rescatistas.


Escenificando farsas que han quedado en completa evidencia (aunque los medios occidentales lo omitan), blanqueando sus verdadero origen e ideología y ocultando su total sintonía y colaboración con todos los grupos yihadistas presentes en Siria, llegaron incluso a estar nominados al Premio Nobel de la Paz ( convertido ya en uno de los galardones más deshonroso e hipócritas del planeta) antes de ganar su Óscar, eso sí, con el apoyo incondicional de “celebridades” como George Clooney y Amal Clooney, Justin Timberlake o aquella que reconoció en su día como EE.UU había creado y manejado Al Qaeda durante años; Hillary Clinton.


Y todo ello cuando parecía que el encumbramiento de yihadistas en la gran pantalla ya había alcanzado su cenit en los años 80; Rambo III, película de propaganda pro-yihadista y radicalmente anti-soviética, recaudó en 1988 un total de 53,7 millones de dólares de la época, con un rotundo éxito mundial que recaudaría 189 millones de dólares a nivel global.

Sorprendentemente, la película trata de pasar desapercibida en EE.UU desde el 11-S (puesto que es imposible borrarla lo mejor es hacer como si no hubiera ocurrido) mientras que en países como España se proyecta de manera más o menos regular en televisiones en abierto sin el más mínimo rubor.

Videojuegos

La industria de los videojuegos ha constituido durante años un puntal clave, que hoy en día bate récords de rentabilidad.

No es ningún secreto el vivo interés que el Pentágono ha tenido siempre en relación a la industria cinematográfica, al igual que ha hecho con desde sus principios con la industria del entretenimiento. Los ejemplos de los frutos de la colaboración entre la industria estadounidense del espectáculo y el ámbito militar son innumerables; ¿de qué manera aprendieron a pilotar drones los operadores actuales de dichos elementos? ¿ O porqué encontramos tantas sospechosas similitudes entre videojuegos e intereses estratégicos del Pentágono y del gobierno de EE.UU?

Uno de los ejemplos más recientes tiene que ver con los cortes de luz en Venezuela, simulados en el videojuego Call of Duty, el cuál recrea en su más reciente versión una intervención militar en Caracas para instalar un virus en el sistema eléctrico para generar un apagón total. Call of Duty genera más beneficios que la panoplia cinematográfica de Marvel o la última saga de Star Wars, y por supuesto, ya planea producir su propia película.(19) (20)

Pero el ejemplo más sangrante es el del exitoso videojuego Fortnite. Según Goldman Sachs, el sector del videojuego, con Fortnite como estrella, captó 3.300 millones de dólares a través del capital de riesgo desde 2013, mientras que solo en 2018 habría captado más de 1400 millones de inversión. Se trata de la mayor ronda de financiación en la historia del sector.(21)

Este multimillonario negocio ha situado a Epic Games, el estudio responsable del juego, con una valoración de 13.300 millones de euros. Y entre sus principales inversores figuran el fondo de capital de riesgo KKR y otros fondos de inversión como Vulcan Capital, Kleiner Perkins (entre cuyos consejeros encontramos a Al Gore o Colin Powell) o Lightspeed Venture Partners, además de The Walt Disney Company, Endeavor o Tencent.


El citado fondo KKR, cuyo valor bursátil se eleva a 150.000 millones de dólares, y cuenta entre sus empleados al general David Petraeus (ex director de la CIA) quien participó de manera decisiva en el envío de fondos y armamento a al-Qaeda y Daesh en el marco de una de las operaciones de tráfico de armas más importantes de la Historia y completamente ignorada en Occidente; la Operación “Timber Sycamore”.


Superhéroes anticomunistas: el cómic

Realizando una breve retrospectiva, durante el siglo XX, el cómic “made in América" fue una de las señas de identidad de la propaganda estadounidense, específicamente destinada al público infantil y juvenil que logró su éxito explotando intensamente todos los principios psicológicos aplicados al aprendizaje anteriormente mencionados.

En el siglo XXI, gracias a mega-corporaciones como Disney, estas historias y personajes viven una segunda edad de oro a través de la ingente e inagotable producción cinematográfica basada en cómics que inunda los cines de todo el mundo y mantiene en todo lo alto la colonización cultural estadounidense en gran parte del planeta.

El autor Carlos A. Buendía Moreno realizaba una excelente síntesis de la evolución de la propaganda a través del cómic, cuyos aspectos principales sintetizaremos a continuación.(22)

En 1937 y 1939 nacen Action comics (DC COMICS) y Timely comics (MARVEL COMICS), con EEUU aún luchando por salir de su “Gran Depresión” y con el pensamiento comunista avanzando aún incluso dentro de los propios EE.UU.

Todas sus creaciones apuntaban a defender la libertad frente a un peligroso enemigo común, el comunismo, sembrando la semilla de lo que serán los cómics en la “guerra fría” o la “caza de brujas” de McCarthy, con un enemigo común bien definido y que la juventud conocía desde su más tierna infancia.

Se produce una conveniente adaptación de los contenidos al iniciarse la Segunda Guerra Mundial y la industria norteamericana cambia brevemente de enemigo para promocionar las supuestas victorias estadounidenses frente a el Eje. Éstos cómics presagiaban la manipulación futura de los hechos históricos ya que en ellos los superhéroes estadounidenses se anotan incluso la derrota nazi en Stalingrado o la toma de Berlín.

En esta época nacerá el “Capitán América”, cuya primera aparición (1944) reflejaba al Capitán América golpeando al mismísimo Adolf Hitler. También nacía “Superman” (1940, Action comics) con una historia llamada “Cómo Superman acabaría con la guerra”, que concluye con Superman golpeando y capturando a Stalin y Hitler para llevarlos hasta Ginebra donde serían condenados a cadena perpetua.

Curioso argumento cuando la realidad nos dicta que solo la insistencia del líder soviético Iosef Stalin en realizar un proceso judicial y universal al fascismo hizo posible la celebración de los juicios de Núremberg frente a las extrañas reticencias anglo-americanas personalizadas en Churchill y Truman.

Era 1944 y ya era creado un mantra propagandístico que no sólo ha sobrevivido a la Guerra Fría sino que hoy goza de máxima actualidad entre los revisionistas anti-soviéticos ; la URSS y la Alemania nazi eran lo mismo.

Una vez finalizada la guerra y realizada la Operación PaperClip, mediante la cuál miles de nazis pasaron a trabajar para la administración estadounidense, se llevó a cabo “la transición de nazi a comunista en los villanos”; el Capitán América se enfrentaba ahora a enemigos como “Cráneo Rojo” un científico nazi encargado del departamento de misticismo que con el tiempo pasaría a engrosar las filas del terror rojo, es decir, recreaba en el cómic lo que en la realidad habían llevado a cabo los servicios secretos estadounidenses y británicos.

El cómic siguió adaptándose como instrumento de propaganda según las necesidades del momento: durante la guerra de Corea o la llegada al poder Mao Zedong, los cómics de “The Flash” (DC comics), mostraban la lucha del superhéroe contra el malvado “Ming”, una especie de vampiro amarillo que quería poseer el mundo a través de una sociedad sin clases y que no era sino la representación de Mao y demás comunistas asiáticos.

De hecho evolucionó hacia puntos grotescos donde los soviéticos y demás comunistas presentaban estereotipos claramente racistas, presentándolos con rasgos físicos más parecidos a los de un neandertal, además de conferirles una superfuerza que les servía para mantener al pueblo sometido y a los que solo los héroes de rasgos perfectos y divinos norteamericanos podían osar enfrentarse.

Con el triunfo de la Revolución Cubana, Fidel Castro también “se ganó” su propio cómic; en “Tales of Suspense”(Marvel) Fidel Castro, caracterizado como el “Fantasma Rojo", es derrotado por un Iron Man que ejercía de libertador de Cuba.

Los superhéroes anticomunistas eran globales y actuaban allí donde la Libertad los requiriese; Ant Man (Marvel comics) acudía a la RDA para descubrir como los soviéticos estaban creando un ejército de orangutanes super-inteligentes para dominar al mundo y donde el “héroe” revertía la situación hasta el punto de convertir a los soviéticos en primates y encerrarlos en jaulas.

En este punto la creación artística se confunde con la periodística y sus ecos llegan a nuestros días; en 2016, por ejemplo, encontramos el siguiente artículo del periódico español “El Confidencial" (23):

“Los ‘hombres mono’ de Stalin, soldados invencibles. El destino había colocado ante él la posibilidad de crear el militar perfecto, un ejército de ‘hombres mono’ que se ajustaba a sus sueños.”

También es curioso comprobar cómo otro tipo de estereotipos que hoy serían impensables en el mundo de lo políticamente correcto no haya siquiera sido revisitado por la horda de activistas (FEMEN) deseosas de atacar a Rusia con cualquier atisbo de polémica.

Los cómics que hoy gozan de tanta popularidad trasladados a la gran pantalla y que proyectan una nueva imagen de la mujer como heroína, son los mismos que presentaban a la mujer espía soviética como una mujer de gran belleza, un objeto sexual al servicio de los oscuros intereses del KGB y que embaucaba con sus encantos sexuales a los ingenuos ciudadanos norteamericanos para poder conseguir información o dinero (Las hermanas Romanova (Marvel Comics).

Periódicamente siguen apareciendo hoy en día alertas de los servicios de inteligencia occidentales alertando de posibles “trampas de miel" de mujeres rusas al servicio del Kremlin (24), mientras que sistemáticamente son despreciados y olvidados los logros de la mujer en países como la URSS o la RDA.

Thor en los años 60

Otro de los personajes favoritos de los niños en el mundo libre occidental (tanto en los años 60 como en 2019) es Thor.

Thor luchó contra el comunismo en Latinoamérica, investigó el aumento de deserciones de científicos estadounidenses a las filas soviéticas o se enfrentó al Hombre Radioactivo de la China comunista en pleno Nueva York.

Lo más curioso de todo es la elección del personaje; un ser mitológico nórdico de una raza superior que se enfrenta al comunismo allá donde sea necesario…¿recuerda a otra cosa, verdad?.

Propaganda de guerra

El cuerpo teórico de la propaganda está suficientemente estudiado como para garantizar el éxito de cualquier campaña utilizando los procedimientos adecuados.

Lo que distingue a la propaganda de guerra de otros tipos de propaganda es su aplicación a la “Guerra psicológica”, concepto nacido en Estados Unidos y dónde el Departamento de Defensa de Estados Unidos la define como "operaciones planificadas para influir, mediante determinadas informaciones, sobre las emociones y motivaciones y por consiguiente sobre el comportamiento de la opinión pública, organizaciones y gobiernos extranjeros, para inducirlos o fortalecer actitudes favorables a los objetivos previamente estipulados".

Podemos realizar una clasificación en función de quién es el emisor y qué es lo que pretende.

La propaganda blanca es originada por una fuente abierta e identificada a la que se antemano se considera confiable. Propagan un contenido preciso, que sin embargo no ha de ser necesariamente cierto en su totalidad y ni siquiera contrastado.

La propaganda gris se presenta deliberadamente como neutral, pero es originada y suministrada por un adversario, normalmente propagando información falsa.

Finalmente tenemos la propaganda negra, que se utiliza para distorsionar o perjudicar el mensaje del enemigo. Normalmente trata de hacerse pasar como si se tratara del mensaje del adversario. (25)

A estas formas tradicionales de propaganda podemos agregarle una variante reciente ; el pasado 12 de marzo de 2018, Theresa May, primera ministra británica argumentó ante la Cámara de los Comunes concluyendo que es "muy probable" que Rusia fuera responsable del envenenamiento al ex-espía Skripal.

Los británicos inauguraban de esta forma la era del “highly likely", concepto para nada novedoso pero que de esta manera adquiría rango de oficialidad. A partir de ese momento el concepto puede aplicarse a cualquier caso y exime de la presentación de pruebas, del cumplimiento de las legislaciones nacionales y del respeto al derecho internacional.

Es interesante reparar en el detalle de que la archifamosa serie es producida por HBO ( que también posee Vice News) en colaboración con Sky; es curioso que tanto los reporteros de Vice pudieran filmar abiertamente reportajes en Raqqah durante el apogeo de DAESH, así cómo sus colegas de Sky News siguen pudiendo realizar sus reportajes desde los enclaves yihadistas de Idleb en Siria. BUSCAR FOTOS

Aprendizaje, psicología y propaganda de guerra

La propaganda de guerra actual se construye en base a procesos psicológicos y de aprendizaje que son comunes a todos los seres humanos.

La amplitud y profundidad de los estudios realizados durante décadas acerca del control de la conducta humana han demostrado la eficacia del empleo de principios de psicología aplicados al aprendizaje y por tanto, éstos se emplean constantemente en la construcción de la propaganda que podemos observar a diario.

Estas leyes son extremadamente útiles a la hora de conformar la propaganda y nos ayudan comprender, en el caso de la serie que tratamos, el porqué de su éxito y de su eficacia.

Los conceptos básicos del aprendizaje aplicados en los procesos de elaboración de propaganda de guerra se emplean con distintos grados de intensidad, capacidad o motivación en función de los objetivos deseados:

--La ley de la preparación
El aprendizaje sólo puede tener lugar cuando el receptor está listo para aprender. Llevamos décadas sometidos al condicionamiento necesario, ejercido por televisión, radio o cine y dónde se establece la dicotomía "bueno-malo", presentando a los enemigos de Occidente como verdaderos demonios y predisponiendo al espectador ante la información que va a recibir. Educados para aceptar determinadas voces como autorizadas ( gobierno, prensa, películas, series, ONGs..), el proceso de preparación de inicia casi desde la edad escolar.

--La ley de la primacía
En cualquier proceso de aprendizaje la fase inicial es crítica. Es en estos momentos cuando está demostrado que los conceptos son más proclives a fijarse en la mente. Dado que ha quedado demostrado que para la mayor parte del público consumidor de series como “Chernóbil" esta ha sido su primera y única toma de contacto con el hecho histórico, este principio resulta decisivo.

Es un proceso común en cualquier ser humano; cuando se tiene contacto con algo por primera vez y sobre lo que no se posee ninguna noción ni conocimiento previo, lo primero que se aprende al respecto queda instintivamente asentado como un cimiento cierto, ya no basado en el conocimiento sino en la creencia, haciendo complicado modificarlo a posteriori.

Respecto a la propaganda de guerra, en casos de conflicto se comprueba cómo aparecen rápidamente eslóganes cortos, concisos y directos que condicionan cualquier conocimiento posterior. Es lo que observamos a día de hoy con el presidente Assad, con Maduro o con Putin y como ya se hizo anteriormente con Milosevic en Serbia, con Saddam en Irak o con Kadhafi en el caso de Libia, entre otros muchos.

--La ley del ejercicio o de la práctica
Un principio tan simple como eficaz; Cuanto más repite algo una persona, mejor es capaz de retener ese conocimiento. Vendría acompañado por una segunda parte de esta ley que establece que el conocimiento no utilizado se debilita y tiende a desaparecer de la memoria.

Desde la óptica del emisor de propaganda, se aplica la ley de la repetición Es por tal razón que la propaganda es constante y repetitiva, adecuada a un mundo actual donde cala el mensaje sencillo y las ideas complejas parecen rechazarse instintivamente.

Las insistentes reiteraciones persiguen como fin que el espectador acabe por asociar dichos estímulos con las respuestas emocionales que se buscan provocar ( ira, indignación, pasividad...).

--La ley del efecto
El aprendizaje se refuerza cuando se asocia con una sensación agradable o satisfactoria, obteniéndose igualmente el efecto inverso; el aprendizaje se debilita cuando se asocia con una sensación desagradable.

En el terreno de la guerra psicológica se relaciona con la ley de primacía, utilizando noticias positivas, expuestas con cuidadosa escenografía y estética para ensalzar algo y utilizando estos recursos a la inversa a la hora de presentar el objetivo a denigrar. Como ha sido demostrado, el elemento estético contribuye decisivamente a disipar el juicio crítico del receptor.

En el caso de la mencionada serie, la evidencia de su eficacia es indiscutible.

--La ley de la intensidad
Cuanto más entusiasmo e interés despierta una lección o acontecimiento, tanto más probable es que sea recordada. La creación de experiencias prácticas, u otras que hagan que el receptor se emocione (con lo que hace o aprende), hará la lección más fácil de recordar.

Significa en la práctica que aquello que se enseñe o presente con mayor intensidad y afectando a un numero mayor de sentidos, será absorbido con mayor intensidad y el recuerdo perdurará. El sentido mas directo y cuya información proporcionada no necesita de una comprensión profunda es la vista, lo que convierte a la imagen en el arma principal de la guerra psicológica, capaz de insertar mensajes directos a todos los niveles de una sociedad independientemente de su nivel socio-cultural.

Aún en el caso de que la manipulación pueda ser descubierta, la efectividad de los desmentidos es comparativamente escasa a la hora de contrarrestar el efecto de las falsas noticias, constituyéndose así en una de las razones de la gran efectividad de la guerra psicológica.

Un ejemplo evidente lo encontramos en el rodaje con figurantes y posterior emisión de la falsa caída de Trípoli en 2011; rodada en Qatar y emitida en Libia sustituyendo la señal de la televisión de aquel país, constituyó un factor decisivo para la caída de la capital libia en manos de los yihadistas.

--La ley de lo reciente
Esta ley básica advierte que tendemos a recordar lo más reciente que hemos aprendido. Para un correcto proceso de aprendizaje se hace necesaria una periódica recapitulación de los conocimientos previos, para reasentarlos y poder seguir construyendo sobre ellos.

Tengamos en consideración que la propaganda debe desplegarse en el entorno actual de inmediatez de la era digital, razón por la cuál se ha desarrollado vertiginosamente una verdadera industria capaz de proporcionar novedades constantes, pero que no renuncia a recapitular periódicamente para asentar los conceptos deseados en el público que sirve de objetivo.

Un ejemplo diáfano lo constituye el uso de los niños para la propaganda de guerra. Existen casos flagrantes a lo largo del tiempo; tal vez uno de los más célebres fue el montaje de los supuestos bebés muertos a manos de soldados iraquíes en Kuwait. Nijirah-al Sabah, la hija del embajador kuwaití, asesorada y preparada por una agencia estadounidense de relaciones públicas, se hizo pasar por testigo de un supuesto secuestro y asesinato de bebés que estaban en una maternidad kuwaití, dentro de incubadoras.

Dos enfermeras filipinas que trabajaban en la maternidad en cuestión desmintieron los hechos, y declararon inclusive que nunca habían visto a Nijirah-al Sabah. Sólo años después la historia entera sería destapada y desacreditada; sin embargo, una vez más, sirvió a sus propósitos en el momento adecuado.

 NOTAS:
(1) Christopher Hitchens, “The Trial of Henry Kissinger”.
(2) https://actualidad.rt.com/viral/319642-equipo-cambiar-nombre-reivindicar-tierra-plana
(3) https://smoda.elpais.com/moda/actualidad/chernobyl-vestuario-ropa-hbo/
(4) https://www.vox.com/culture/2019/6/4/18647339/chernobyl-finale-hbo-truth-how-accurate
(5) https://elpais.com/cultura/2019/06/07/babelia/1559926054_845405.html
(6) https://elpais.com/cultura/2019/06/05/television/1559727357_920246.html
(7) https://elpais.com/cultura/2019/05/23/television/1558637390_884731.html
(8) https://www.elmundo.es/f5/mira/2019/06/11/5cffc2acfdddffd5698b464c.html
(9) https://slate.com/culture/2019/06/chernobyl-finale-hbo-miniseries-craig-mazin-interview.html
(10) http://m.diariodecuba.com/internacional/1560450310_46944.html 
(11) http://www.cubadebate.cu/especiales/2019/06/09/chernobil-se-cura-en-la-habana-el-episodio-que-no-conto-hbo/
(12) https://www.lavanguardia.com/internacional/20110426/54145745335/ucrania-homenajea-a-los-liquidadores-de-chernobil-en-el-25-aniversario.html
(13) https://www.efe.com/efe/america/portada/ultranacionalistas-ucranianos-derriban-un-busto-del-mariscal-sovietico-gueorgui-zhukov/20000064-3990852
(14) https://www.enlacejudio.com/2018/12/27/ucrania-fiesta-colaborador-nazi/
(15) https://www.straitstimes.com/asia/east-asia/china-could-build-30-belt-and-road-nuclear-reactors-by-2030-official
(16) https://www.inverse.com/article/42980-fukushima-disaster-radioactive-water
(17) https://mobile.twitter.com/CIA/status/1120123885771476992?ref_src=twsrc%5Etfw%7Ctwcamp%5Etweetembed%7Ctwterm%5E1120123885771476992&ref_url=https%3A%2F%2Factualidad.rt.com%2Factualidad%2F312669-antiguo-subdirector-cia-cameo-juego-tronos
(18) https://www.elperiodico.com/es/ocio-y-cultura/20181209/entrevista-thomas-vinterberg-estreno-kursk-7191921
(19) https://www.elsotanoperdido.com/noticias/call-of-duty-genera-mas-beneficios-que-el-universo-cinematografico-de-marvel/2019011048662
(20) https://www.yogonet.com/latinoamerica/noticias/2018/08/22/77107-goldman-sachs-augura-oportunidades-de-negocios-para-los-esports
(21) http://www.expansion.com/economia-digital/companias/2018/11/15/5beabaf946163f38638b464e.html
(22) http://www.revistalacomuna.com/cultura/propaganda-comics/
(23) https://www.elconfidencial.com/sociedad/2016-08-28/delirios-populismo-stalin-hombres-mono-soldados-invencibles_1252025/
(24) https://mundo.sputniknews.com/europa/201704221068579310-mujeres-espias-rusas-atemorizan-dinamarca/
(25) http://lugrogeopolitica.blogspot.com/2016/10/propaganda-de-guerra-actual-psicologia.html